Varios miles de personas, convocadas por el CNA, recorrieron los 500 metros que Mandela, el 11 de febrero de 1990, en sus primeros momentos de libertad tras 27 años de prisión, caminó mientras saludaba a sus seguidores frente a la cárcel, de la mano de su entonces esposa Winnie, que tampoco estuvo en el acto.
Antes de los discursos y la marcha frente a la prisión, los dirigentes del CNA y antiguos compañeros de Mandela se reunieron en un desayuno en esa cárcel.