Agentes de la Policía Nacional han culminado un amplio operativo, que ha englobado hasta ocho investigaciones, con la detención de 14 hombres, dos de ellos menores de edad, acusados de cometer hasta 14 delitos de robo con violencia en Alicante. Presuntamente empleaban diversos métodos y armas blancas para intimidar y si no funcionaban hacían uso de "extrema violencia", por lo que algunas víctimas requirieron asistencia sanitaria.
El operativo policial, llevado a cabo por agentes del Grupo II de Investigación de la Comisaría de distrito Norte de Alicante, tuvo su inicio a raíz de una serie de denuncias, en las que los denunciantes manifestaron a los agentes haber sido víctimas de robo con violencia, según ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
En alguno de esos robos, las víctimas tuvieron que requerir asistencia sanitaria debido a la violencia con la que actuaban algunos de los autores.
La gravedad de estas acciones delictivas, en las que presuntamente se empleaba "de forma indiscriminada" la violencia sobre las personas, tenía como objetivo la sustracción de terminales telefónicos u otros efectos de valor.
Para cometer los delitos, presuntamente recurrían a varios métodos o 'modus operandi', como el método conocido como 'Ronaldinho', que consiste en rodear a la víctima y sujetarla, simulando realizar un regate de fútbol para distraerle y aprovechar el contacto para sustraerle al descuido el bien interesado.
En otras ocasiones, empleaban armas blancas para intimidar a sus víctimas cuando lo creían oportuno. Otro de los métodos empleados para cometer los robos consistía en entablar una pequeña conversación con la víctima, indicándole si quería practicar artes marciales a la vez que le golpeaban en el pecho. Este método, lo utilizaban normalmente cuando la víctima llevaba colgada del cuello una cadena de oro, con el fin de sustraérsela en el momento que le golpeaban en el pecho.
Sin embargo, cuando ninguno de los métodos anteriormente descritos funcionaba, presuntamente agredían con "extrema violencia" a sus víctimas para consumar el robo y sustraer los efectos que portaban.
Varios de los robos se cometieron en el interior del transporte público y en los aledaños de las paradas, cuando las víctimas se encontraban haciendo uso de su terminal móvil no prestando atención al entorno que les rodeaba.
Para ello, los autores empleaban un 'modus operandi' muy concreto, que supuestamente consistía en seleccionar a víctimas que se encontraban haciendo uso de teléfonos móviles de alta gama y, cuando el transporte público abría sus puertas, arrebataban de un fuerte tirón el teléfono móvil de la mano de la víctima y huían corriendo del lugar.
Otro modo consistía en realizarle un seguimiento hasta llegar a una zona en la que la víctima se encontrara indefensa para llevar a cabo la perpetración del ilícito penal, utilizando para ello la violencia o la intimidación.
UNA VÍCTIMA PERDIÓ PIEZAS DENTALES
A los agentes les llamó especialmente la atención la agresividad empleada por uno de los detenidos, quien presuntamente ocasionó a una de sus víctimas la pérdida de varias piezas dentales, debido a una "brutal agresión".
Este detenido, junto con cuatro varones más, formaba parte de un grupo criminal "bastante activo" que presuntamente se dedicaba a la comisión de robos con violencia.
Ante estos hechos, los agentes iniciaron un total de ocho investigaciones encadenadas en las que, tras diversas gestiones policiales llevadas a cabo a lo largo de dos meses, culminaron con la detención de un total de 14 varones, dos de ellos menores de edad. Han sido acusados de cometer 14 delitos de robo con violencia, un delito de lesiones y un delito de hurto. Además, a cinco de ellos también se les acusa de pertenencia a grupo criminal.
Doce de los detenidos, de entre 18 y 23 años, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Alicante, quien decretó prisión provisional para seis de ellos. Por otro lado, los dos menores fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Menores de Alicante.