El Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Sevilla ha seleccionado a los expertos que integrarán el jurado de la primera edición de los Premios de la Arquitectura Técnica de Sevilla. Esta "novedosa iniciativa", como la han definido desde el COAAT, incluirá cinco categorías distintas y un Premio Especial denominado “Azulejo”, que será concedido únicamente por la junta de gobierno del Colegio.
Los miembros del jurado seleccionados son destacados profesionales en el campo de la arquitectura técnica. El presidente será José Manuel Flores Martín, Arquitecto Técnico y Presidente del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Sevilla y la secretaria, Patricia Sánchez-Lanuza Rodríguez, Arquitecta Técnica y Secretaria del mismo colegio.
En cuanto al resto del jurado, lo componen Alicia Martínez Martín, Arquitecta y Secretaria General de Vivienda de la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía; Sergio Vázquez Jiménez, Arquitecto Técnico, Secretario general de la Organización Europea para la Evaluación Técnica (EOTA) y vicepresidente del Consejo Europeo de Economistas de la Construcción; José María Cabeza Méndez, Arquitecto Técnico, galardonado con el Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales del Ministerio de Cultura y Premio Nacional de Edificación; Mª Carmen Fernández Hernández, Arquitecta Técnica especializada en accesibilidad universal e innovación en la Fundación ONCE y Embajadora de la Arquitectura Técnica de España; y Francisco Morcillo Balboa, Arquitecto Técnico, experto en planificación y consultoría en Innovación territorial y urbana, y Project Manager en Ingeniería y Arquitectura.
Las categorías para las cuales se han presentado los candidatos son cinco. El primero es el Premio a la Sostenibilidad y Eficiencia Energética, que premiará las intervenciones que integren las mejores soluciones constructivas para promover una mayor eficiencia energética con materiales de bajo impacto ambiental.
Se sigue el Premio a la mejor intervención de Rehabilitación Edificatoria, que valorará las intervenciones de rehabilitación que representen una recuperación significativa de propiedades de interés social; y el Premio a la Innovación e Investigación, que reconocerá las contribuciones en innovación o investigación, incluyendo aspectos empresariales, gestión, control y dirección de obras, prevención de riesgos laborales, investigaciones, protocolos, guías, manuales, nuevos materiales y mejoras en soluciones constructivas.
Cierran el Premio al Mejor Proyecto y/o Dirección, que destacará los proyectos o direcciones de obra que, por su singularidad, sean considerados referentes por la eficiencia en calidad, costes, tiempos y uso de recursos; y el Premio a la Acción Solidaria, que valorará las iniciativas solidarias que, de manera individual o colectiva, respondan a las necesidades sociales y generen mejoras significativas en la vida de las personas o de la sociedad en general.
Esta convocatoria busca reconocer la contribución de los profesionales de la Arquitectura Técnica al fomento de la calidad constructiva y el bienestar social en Sevilla y su provincia. Los premios están dirigidos a aquellos profesionales cuyo trabajo ha tenido un impacto significativo en el sector, destacando el valor y la importancia de su labor en el desarrollo y mejora del entorno construido. Además, pretenden subrayar el compromiso de estos profesionales con la sostenibilidad, la innovación tecnológica, la rehabilitación y restauración, la dirección de proyectos y la responsabilidad social.
En palabras del presidente de los Aparejadores sevillanos, José Manuel Flores, se resalta “el compromiso del Colegio con la sociedad y con la excelencia profesional y el interés en destacar la importancia de la arquitectura técnica en la construcción de un futuro más sostenible e inclusivo, como agentes dinamizadores de las ciudades y las personas”. Esta iniciativa del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Sevilla tiene como objetivo promover la visibilidad de prácticas ejemplares en el sector y reconocer el papel esencial que juegan estos profesionales en la mejora continua del entorno construido y en su servicio a la sociedad.