La tranquilidad parece haber llegado, en su justa medida, al Sevilla tras las victorias conseguidas ante Getafe y Valladolid. En este último partido causó baja por lesión Isaac Romero, cuya presencia el próximo domingo en San Mamés parece asegurada tras haber entrenado este jueves con el resto del equipo.
Las alarmas saltaron para el Sevilla en Vitoria cuando en el minuto 10 de partido, Isaac Romero tenía que abandonar el terreno de juego tras un lance con su ex compañero Joan Jordán.
El de Lebrija, pieza fundamental para la salvación hispalense el pasado curso, salió por su propio pie del césped de Mendizorroza, aunque los gestos de dolor que mostraba dejaron cierta preocupación en el sevillismo.
Sin embargo, las pruebas realizadas por el club blanquirrojo al futbolista descartaron cualquier tipo de lesión demasiado preocupante, tratándose solamente de un “esguince leve de la sindemosis anterior del tobillo derecho” que lo ha tenido algunos días entrenando al margen del grupo.
Esta molestia supuso que el ariete sevillista causara baja en el duelo ante el Real Valladolid del pasado martes, siendo sustituido por un Kelechi Iheanacho que no parece calar en la afición de Nervión.
La recuperación, tanto física como mental, de Isaac Romero, se antoja vital para los intereses de un Sevilla que necesita seguir sumando victorias a su casillero para alejarse de la zona peligrosa de la tabla y, especialmente, ahuyentar los fantasmas que parecen perseguir al equipo.