Jiménez Becerril participó en la ofrenda floral en la calle Don Remondo, lugar donde fueron asesinados hace 14 años Alberto Jiménez Becerril y su esposa, Ascensión García Ortiz, un acto homenaje que contó con la participación de la familia de ambos, además del alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, con toda la corporación municipal; el ministro de Interior, Jorge Fernández; y el presidente del PP-A, Javier Arenas, entre otros.
“Aquí estamos, sin pancartas, sin gritos, sin consignas, pero con la fuerza de la razón y la moral que unen en silencio”, subrayó Jiménez Becerril, tras afirmar que aún se puede escuchar en Don Remondo “el latir de sus corazones con los nuestros”.
De este modo, insistió en que “entre todos hay que decir un no sereno y rotundo a ETA, a la impunidad, a la amnistía, a la excarcelación y a los beneficios de los terroristas”. “No debemos nada a los terroristas, sino ellos a nosotros y hoy les recuerdo que nos deben la vida de Alberto y Ascensión”, sentenció.
En la misma línea, el alcalde de Sevilla recordó a estos dos “amigos asesinados vilmente, sin motivo ni razón” y ante los que no hay que acostumbrarse a vivir “en su ausencia”, ya que “aunque la maldad del terrorismo se los llevó, siguen estando aquí”.
Por su parte, el ministro del Interior, Jorge Fernández, aseguró que ETA, con su cese de la actividad, no se ha unido a la democracia, sino que “ha sido derrotada por el estado democrático y de derecho”, apuntando que el Gobierno no está dispuesto a igualar a las víctimas de actos terroristas con los miembros de la banda que murieron por la acción de los cuerpos de seguridad.