El primer ministro británico, David Cameron, y el ministro principal escocés, Alex Salmond, han firmado este lunes el acuerdo para la celebración, en 2014, del referéndum sobre la independencia de Escocia.
En la consulta se preguntará a los votantes si desean que Escocia permanezca en Reino Unido, a la que pertenece conjuntamente con Inglaterra desde hace 305 años.
Cameron se opone a la ruptura de la Unión, por considerar que el país sería más fuerte si permaneciese unido. Los sondeos de opinión otorgan únicamente entre un 30 y un 40 por ciento a los partidarios de la independencia.
Escocia e Inglaterra comparten dinastía desde 1603 y contaron con un solo Parlamento, con sede en Londres, desde 1707. En 1999 fue constituido el primer Parlamento escocés en casi 300 años, tras su aprobación en referéndum.