El coordinador local de Hacienda, Carlos Rubio, ha condicionado la continuidad de la plantilla municipal, a la postura que adopte la Junta de Andalucía respecto a la deuda que mantiene el Consistorio con esta institución, en relación con el anticipo reintegrable de 100 millones de euros que le concedió el Gobierno Autonómico hace seis años.
El Ayuntamiento debe pagar la deuda y actualmente tiene un déficit de 19 millones de euros que afectará a su funcionamiento si no pone pronto en marcha medidas de ahorro. Los primeros en ajustarse, aún más, el cinturón, serán los empleados, augura el delegado de Hacienda y Personal, Carlos Rubio, que reconoce las dificultades.
Ahora, Rubio lanza un órdago a PSOE e IU. Si ambas formaciones apoyan una enimienda para que la Junta flexibilice los plazos de cobro de la citada deuda a 40 años, al 1 por ciento, "y se incorpora a la Ley de Presupuestos de la Junta de Andalucía, este equipo de Gobierno se compromete a que el Plan de Ajuste que tenemos que aprobar no conllevará ninguna medida adicional que afecte al personal del Ayuntamiento y de sus organismos autónomos”.
En la oposición opinan que el delegado municipal tan sólo se escuda en esta deuda para ocultar errores pasados y acometer un plan que ya tiene preparado: un ERE. Desde Izquierda Unida reclaman "que haga ajustes en los gastos corrientes del Consistorio para poder hacer frente al pago de la deuda en los términos que firmaron dos veces él y la alcaldesa y no traslade su responsabilidad política a la Junta", ha señalado el portavoz municipal de la formación, Enrique Monterroso.
En el PSOE entienden que en el Ayuntamiento sigue habiendo muchos gastos superfluos que favorecen los intereses de personas afines al PP. El despido de los trabajadores "sería un drama humano para los afectados y un golpe a la economía marbellí", según ha señalado el viceportavoz local Ricardo López. Los socialistas exigen que si la Junta accede a flexibilizar el pago de la deuda, "Rubio ponga de su dinero los 60.000 euros que se ha gastado de las arcas municipales en un informe para despedir trabajadores".
El coordinador de Hacienda ha evitado hablar de despidos, aunque reconoce que existen otras fórmulas para ahorrar en gastos. Pero tampoco los descarta. Entretanto reina la inquietud en la plantilla.
