Un juzgado de Sevilla ha condenado a una mujer que cortó el suministro de agua y luz a un inquilino por dejar de pagar el alquiler, con lo que puso en "grave riesgo" a uno de los ocupantes de la vivienda cuya vida dependía de una máquina con suministro eléctrico.
Una sentencia del juzgado de instrucción 14, a la que ha tenido acceso Efe, explica que el piso, situado en Sevilla, no era propiedad de la acusada María Dolores D.P. sino de un hombre con quien entonces mantenía una relación sentimental, pero se hizo pasar por la dueña y lo alquiló en febrero de 2010 por una renta mensual de 400 euros.
Después del verano, el inquilino Francisco P.E. se enteró de quien era el verdadero propietario de la vivienda y dejó de pagar el alquiler, momento en el que la acusada le amenazó diciendo que "o le volvía a pagar la renta o le haría imposible la vida a él y su familia".
Poco después cumplió su amenaza y el 21 de septiembre de 2010 dio de baja el suministro eléctrico, lo que obligó a Francisco P.E. a gestionar su restablecimiento ante Sevillana Endesa.
Precisa la sentencia que el inquilino vivía con tres familiares, uno de los cuales presentaba problemas de salud y su vida "dependía de una máquina cuyo suministro se hacía con la corriente eléctrica".
El 7 de octubre de 2010, la mujer dio orden de que se cortara el suministro de agua, lo que también tuvo que solventar el inquilino "tras realizar las gestiones y pagar las cantidades correspondientes", según el juez.
Por ello, la sentencia impone a la acusada, junto a tres multas, el pago de 3.000 euros de indemnización al inquilino por los perjuicios causados y de 2.400 euros a su expareja por las mensualidades que no cobró entre febrero y julio.
A fecha de hoy, el legítimo propietario aún no ha podido recuperar la posesión del inmueble, añade el juez.
María Dolores D.P. es condenada por una falta de amenazas y dos faltas de coacciones a una multa de 20 días con cuota diaria de 6 euros en cada caso.
