La Dirección General de Comercio de la Junta ha limitado la liberalización de horarios comerciales al entorno de los monumentos declarados Patrimonio Mundial y su zona de amortiguamiento, y durante la Semana Santa y el mes de abril. El delegado de Empleo, Economía, Fiestas Mayores y Turismo, Gregorio Serrano, ha manifestado que esta decisión es “un poco un disparate” al desligarse de la propuesta aprobada por el Consejo Municipal del Comercio, reclamando así “flexibilidad” y negociación.
El Ayuntamiento de Sevilla había aprobado la propuesta de los comerciantes para que todo el casco histórico gozase de libertad de horarios desde noviembre de un año a abril del año siguiente o la finalización de la Feria de Abril.
Serrano ha manifestado que la propuesta aprobada por el Consejo Municipal del Comercio era precisamente “lo que los propios comerciantes habían pedido” de cara a la aplicación de la liberalización comercial de horarios.
“En nombre de la protección de unos comerciantes, la Junta rechaza lo que ellos mismos han pedido”, se ha encogido de hombros Serrano, defendiendo que “cierta libertad” constituye un estímulo para el sector.