La Agrupación Socialista de Antequera ha querido reconocer un año más la “destacada labor social y humanitaria” de mujeres, que largo de su vida también han dedicado parte de su tiempo en la lucha por los derechos del colectivo femenino y en pos de la Igualdad. Y lo ha hecho, con la que ya es la III edición de los Premios ‘Teresa Espinosa’, que este año ha sobre las antequeranas Francisca Alonso Madueño y Lola Gutiérrez Luque, como la militante socialista de más edad y la mujer más representativa en asociacionismo y voluntariado, respectivamente.
Además, como novedad, se ha querido ampliar estos reconocimientos a otras afiliadas de la comarca. Ana Ramírez Leiva, vecina de Alameda, ha sido quien ha recibido este primer premio como la militante más veterana que ha ocupado un institucional.
En el acto, junto a la secretaria general del PSOE local, Pepa Arranz, y la responsable de Igualdad del partido, Lola Melero, también estuvo presente la diputada provincial y secretaria de Igualdad en Málaga, Fuensanta Lima, para quien la conmemoración del Día de la Mujer debe servir como una jornada de reivindicación, “porque la Igualdad está pasando por sus peores momentos”.
En este sentido, Lima asegura que la reforma de la Administración local va a provocar que los Centros de Información a la Mujer no sean tan efectivos en los municipios pequeños, “donde son los únicos espacios en el que las mujeres acceden a cualquier tipo de ayuda o asesoramiento”.
También asistió al acto la Coordinadora del Instituto Andaluz de la Mujer, Estefanía Martín Palop, para quien este tipo de reconocimientos, es una magnifica forma de hacer memoria sobre el trabajo y el esfuerzo que ha realizado las mujeres del municipio y el resto de la Comarca, “que gracias a ellas hoy estamos aquí”. Eso sí, como subraya, además de ser conscientes sobre los que se ha conseguido, también hay tener en cuenta lo que queda por conseguir, como refleja el lema de este año “ahora más que nunca, juntas somos.”
Para Palop, las políticas de “discriminación positiva” siguen siendo necesarias, como lo demuestran aún las diferencias salariales entre hombres y mujeres, a pesar de que son más ellas las que acaban sus estudios superiores y lo hacen con mejores calificaciones.
