La Guardia Civil ha detenido a tres jóvenes de entre 18 y 20 años y a una niña menor de edad, todos de nacionalidad rumana, como presuntos autores de al menos cuatro delitos de robo con violencia y hurto a cuatro ancianos en las localidades de Láchar, Chauchina, Santa Fe y Beas de Granada, así como del hurto de un monedero a una quinta anciana en Cijuela.
Esta actuación de la Guardia Civil comenzó el pasado miércoles sobre las 12,00 horas, después de que se recibiera una llamada desde la localidad de Chauchina (Granada) informando de que a una anciana dos mujeres jóvenes le habían robado un cordón de oro por el procedimiento del tirón.
Estas persones huyeron en un vehículo de color oscuro con el volante a la derecha conducido por un hombre joven, según informa en un comunicado el Instituto Armado.
Inmediatamente después, la Guardia Civil tuvo conocimiento de que en la localidad de Cijuela dos mujeres jóvenes de las mismas características le habían arrebatado al descuido un monedero a otra anciana; y que poco después habían asaltado a otra en Láchar, donde le quitaron por el procedimiento del tirón una cadena de oro con un colgante.
Tras este último robo, el dispositivo en el que participaban las patrullas de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil más cercanas al lugar de los hechos, y las policías locales de Cijuela y Láchar, consiguió interceptar en la avenida de Peñuelas de esta última localidad, un turismo Volkswagen Passat de color azul ocupado por cuatro jóvenes rumanos cuyas características coincidían con los que se buscaba.
Tras registrar el vehículo, los agentes encontraron una de las cadenas de oro y el colgante que presuntamente acababan de sustraer.
Tras el registro, la Guardia Civil trasladó a los detenidos hasta el Puesto de Santa Fe para instruir diligencias y tratar de averiguar si éstos habían participado en algún robo o hurto más.
Ya en Santa Fe, la Guardia Civil descubrió que una de las jóvenes detenidas llevaba guardados dos folios de recogida de firmas para conseguir donativos para un centro internacional de discapacitados sordomudos y niños pobres.
Estos folios en los que piden firmas son una excusa precisamente para abordar a los ancianos, entretenerlos y aprovechar para quitarles al descuido lo que de valor lleven encima.
Así ocurrió en la localidad de Beas de Granada, donde una de las ahora detenidas abordó a una anciana de 77 años y, mientras le pedía que firmara para ayudar a unos niños enfermos, a la vez que le daba dos besos y un abrazo, le sustrajo una esclava de oro valorada en más de 500 euros.
El último de los robos que se les imputa ocurrió en Santa Fe y la víctima, como en los casos anteriores, fue una anciana a la que le arrebataron una medalla de oro del cuello.