Agentes de Policía Nacional han detenido en la localidad malagueña de Estepona a cuatro personas de entre 35 y 70 años como presuntas autoras de delitos de contrabando de tabaco. Además, a uno de los arrestados se le atribuye también un delito de tenencia ilícita de armas, al haber hallado un arma de fuego de calibre nueve milímetros con silenciador.
En total se han intervenido un total de 5.434 cajetillas de tabaco, valoradas en 21.500 euros; dos pastillas de hachís de 28 gramos cada una, 4.053 euros en efectivo y un vehículo, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
La investigación se inició a raíz de las quejas que presentaron los estanqueros que habían detectado una venta generalizada de tabaco de contrabando en quioscos de Estepona.
Así, las primeras pesquisas condujeron a los investigadores hasta un quiosco de la localidad desde donde supuestamente se abastecía con tabaco de contrabando a varios más de Estepona. En el lugar, regentado por un vecino de la localidad de 70 años, trabajaban además tres personas, dos hombres y una mujer.
Con la finalidad de investigar los hechos, se estableció un dispositivo de vigilancia. De este modo, investigadores del grupo de pequeño tráfico de la comisaría, observaron un trasiego constante de los tres trabajadores que acudían hasta el garaje del hombre, donde tenía aparcado su coche, y cómo sacaban del interior bolsas con cartones de tabaco.
Según las indagaciones, este individuo, al parecer, sacaba "cientos de cajetillas de tabaco que guardaba en su domicilio particular ocultas en el maletero del vehículo que utilizaba a modo de almacén". Así, realizaba "múltiples viajes para evitar la sanción administrativa que supondría para los quioscos compradores la acumulación de más de dos cartones".
