Osasuna ha conseguido su cuarta victoria en el Sadar, con goles de Oriol Riera (m.6) y de Roberto Torres (m.88), ante un Getafe que mereció mejor suerte por su dominio y mejor fútbol, pero su falta de acierto le condenó y suma ya ocho jornadas sin ganar.
Osasuna consigue con este triunfo igualar al equipo madrileño en la tabla con 25 puntos y dar un salto en la clasificación hacia la zona media, alejándose de los puestos de descenso directo a la segunda división. Premio a su esfuerzo, acierto y a su combatividad, ante un Getafe que nunca se rindió.
El Getafe dio el primer susto con un lanzamiento de Pedro León que rechazó Andrés después y Diego Castro remató de cabeza muy desviado. No obstante, los navarros se adelantaron en el marcador a los seis minutos. El chileno Silva envió un balón largo al área madrileña y Oriol Riera se desmarcó bien y elevó la pelota por encima de Moyá.
El Getafe se hizo dueño del esférico jugando con criterio y dominó el primer tiempo creando varias ocasiones de gol, con protagonismo de Lafita en un remate de cabeza a la base del poste y en tiro cruzado que atrapó Andrés. Osasuna se dedicó a defender su ventaja, con apuros en varios momentos. Los rojillos solo dispusieron de una ocasión de Armenteros en sus escasas arrancadas hacia el área madrileña, y una buena parada de Moyá a tiro cruzado de De las Cuevas.
Fue llamativo que los dos entrenadores, Javi Gracia y Luis García, tuvieran que realizar dos cambios en cada equipo entre el minuto 40 y el 45 del primer tiempo, por las lesiones de Puñal, De las Cuevas, Rafa y Ciprian.
En la reanudación, el Getafe buscó el empate y mantuvo su dominio territorial. Colunga se adelantó al portero navarro y mandó el balón a gol, pero Damiá evitó el tanto al sacar la pelota en la línea. Los navarros se multiplicaron en defensa, y a diferencia de la primera mitad, intentaron salir con más peligro al contraataque.
La oportunidad más clara para los locales llegó por medio de un robo de balón de Cejudo con pase final a Armenteros que lanzó a bocajarro y el meta Moyá rechazó con su cuerpo. Pedro León dispuso de una falta directa para conseguir el empate, pero su disparo pegó en el cuerpo de la barrera.
Los últimos minutos fueron intensos con un Getafe lanzado a por el gol y un Osasuna tapando la creación de juego visitante. Andrés le sacó un balón de oro con la mano a Colunga dentro del área en la mejor opción de ataque de los madrileños. Con el Getafe volcado, un contraataque de Roberto Torres, que recorrió todo el campo, terminó dentro de la portería de Moyá en el minuto 88. Fue la puntilla para el equipo madrileño, que no gana desde el 29 de noviembre.
