La provincia jienense tiene nueve zonas de baños naturales autorizadas por la Junta de Andalucía y la capital no cuenta con ninguna de ellas. Hace años, en la zona de Los Cañones, las familias se reunían para refrescarse en un río que apenas tiene caudal y los más atrevidos subían el río y se bañaban, pero ya no es una práctica habitual. Así lo aclara el presidente del grupo ecologista GEA, Manuel Ruiz, que asegura que “el acceso a la zona es muy complicado” e insta a las administraciones a aunar esfuerzos para acondicionar la zona, que por su ubicación, permite el esparcimiento para el ocio de los jienenses.
Las nueve áreas autorizadas para el baño en los ríos y pantanos de la provincia de Jaén son el embalse del Encinarejo y el río Jándula, en el término municipal de Andújar; el embalse del Rumblar, en Baños de la Encina; el río Linarejos y el Puente de las Herrerías, en Cazorla; el arroyo Los Molinos, en Siles; el río Aguascebas, en Villacarrillo; el Charco de la Pringue, en Villanueva del Arzobispo, y el Charco de la Cuna, en Santiago-Pontones.
Los técnicos de la delegación territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía realizarán durante este verano un total de 45 visitas de inspección para controlar y tomar muestras de la calidad del agua de estas zonas naturales autorizadas para el baño público. Los primeros análisis se realizan esta semana. El verano pasado las aguas de las nueve áreas autorizadas tuvieron una calidad aceptable.
