Al menos 17 personas -diez de ellas civiles y cuatro militares de la OTAN- murieron y otras ocho resultaron heridas hoy en un atentado suicida frente a un centro de salud en el norte de Afganistán, informaron a Efe fuentes oficiales.
El atentado se produjo a las 07.00 hora local (02.30 GMT) en la zona de Qalandarkhel Bagram, en la provincia de Parwan, y además de los civiles y de los miembros de la OTAN, de nacionalidad checa, murieron dos policías y el suicida, precisó el portavoz del gobernador provincial, Wahid Seddiqi.
Uno de los heridos es un niño, añadió.
El suicida detonó el chaleco con explosivos que llevaba frente a una clínica.
Un portavoz de las fuerzas de la OTAN en Afganistán (ISAF) aseguró a Efe que dos de los militares fallecieron en el lugar del atentado y los otros dos cuando eran atendidos de las graves heridas que sufrieron.
La ISAF no confirmó la nacionalidad de los fallecidos, algo que corresponde a cada Estado de la organización multilateral.
Según los datos proporcionados por el portal independiente "icasualties", en lo que va de año han muerto en Afganistán 46 soldados de la OTAN, 34 de ellos estadounidenses.
El conflicto afgano se halla en uno de sus momentos más sangrientos desde la invasión de Estados Unidos que propició la caída del régimen talibán hace doce años y el número de víctimas civiles ha aumentado en los últimos años.
El número de muertos civiles se situó en 2.959, mientras que el de heridos alcanzó los 5.656, un incremento del 7 % y del 17 % respectivamente en comparación con el año anterior, de acuerdo con la ONU.
Las tropas internacionales comenzaron en 2011 a retirarse gradualmente de Afganistán y a transferir por fases la competencia de la seguridad al Ejército y Policía afganos.
La ISAF concluirá su misión en Afganistán a finales de este año, pero Estados Unidos ha anunciado que mantendrá unos 9.800 soldados en el país hasta completar su salida total a finales de 2016.