Obama dio órdenes al Departamento de Estado, del Tesoro y del Comercio para que se ponga en marcha lo antes posible el levantamiento de estas restricciones que incluye también medidas para facilitar las comunicaciones con la isla y un llamamiento al gobierno castrista para que no interfiera en los envíos.
Según explicó el alto funcionario, la idea de la iniciativa adoptada ayer es “apoyar el deseo del pueblo cubano de determinar su propio destino”.
A partir de ahora, las personas que lo deseen podrán enviar remesas y paquetes humanitarios a la isla, y se levanta la prohibición de mandar mercancías como semillas para la siembra o artilugios para la pesca.
Los envíos podrán dirigirse a cualquier ciudadano de la isla, con la excepción de funcionarios del régimen, que no podrán beneficiarse de estas medidas.
Asimismo, las visitas carecerán de límite temporal o de frecuencia, explicó el alto funcionario.
Un tercer aspecto de la iniciativa prevé aumentar las comunicaciones hacia la isla y aumentar las negociaciones para buscar y poner en marcha servicios de esta índole en Cuba. Así, por ejemplo, personas que lo deseen podrán pagar desde el exterior los teléfonos móviles de residentes cubanos.
El levantamiento de las restricciones se combina con un “llamamiento claro”, explicó el alto funcionario, del Gobierno de Obama para que el régimen cubano deje de interferir en los envíos y la vida de sus ciudadanos. “Nadie debe intervenir en las relaciones familiares cubanas, tampoco el Gobierno cubano”.
Por su parte, la disidencia interna cubana calificó ayer de “excelente” la noticia del levantamiento de restricciones.
Representantes de la oposición agregaron que ahora la pelota está en el tejado del Gobierno que preside el general Raúl Castro, a quien reclaman que libere a los presos políticos y permita la salida de los cubanos de la isla de manera libre.
“Me parece una cosa excelente, muy positiva, que el pueblo cubano va a recibir con alegría”, declaró a Efe el economista Óscar Espinosa Chepe, uno de los 75 apresados en la llamada primavera negra de 2003, que ahora disfruta de licencia penitenciaria.