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Sábado 18/05/2024
 
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España

Sánchez preguntará la próxima semana a Rajoy en el Congreso si cree que las reformas educativas garantizan la igualdad

Los socialistas realizarán dos preguntas y una interpelación al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, para que aclare y valore algunas de las políticas desarrolladas por el ministerio

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El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, preguntará la próxima semana al presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, acerca de si cree que las reformas emprendidas por el Ejecutivo en materia de Educación "garantizan la igualdad de oportunidades en el acceso" a este derecho.

   Además, los socialistas realizarán dos preguntas y una interpelación al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, para que aclare y valore algunas de las políticas desarrolladas por el ministerio.

   Concretamente, el diputado Miguel Ángel Heredia pedirá a Wert una "valoración" de su política de becas. Asimismo, la diputada Angelina Costa le pedirá que explique "cómo ha recibido el Gobierno el rechazo mayoritario" a la aprobación del Decreto de ordenación de los estudios universitarios aprobado el pasado 30 de enero.

   Los socialistas harán también una interpelación para que el ministro explique la reforma de los grados universitarios aprobada el viernes 30 de enero en Consejo de Ministros.

   Con la nueva medida, las universidades españolas podrán proponer la creación de grados de tres años, en lugar de los cuatro que establecía la normativa anterior para la mayoría de titulaciones. En caso de crearse, estos programas podrían tener además menor carga lectiva (entre 180 y 240 créditos ECTS) que la que necesariamente debían tener los grados hasta ahora, un total de 240 créditos ECTS.

   La reforma obtuvo el rechazo de los sindicatos de enseñanza y de las organizaciones estudiantiles, y la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) se reunió el pasado lunes para acordar una moratoria de dos años en la aplicación del nuevo Real Decreto.

   A juicio de los rectores, una aplicación inmediata del nuevo sistema de titulaciones sería "imprudente", en primer lugar porque todavía no se ha evaluado los resultados del anterior sistema de grados y, en segundo lugar, porque consideran que, de implantarse los nuevos grados de forma desorganizada podría generar "caos" en el sistema, al haber titulaciones con el mismo nombre y distinto peso académico.

   Por su parte, los estudiantes creen que la reducción de los grados a tres años provocará un encarecimiento de los estudios universitarios y una devaluación de los títulos de grado, por lo que será "necesario" estudiar un master para poder acceder al mercado laboral.

   A su vez, los profesores señalan que la reducción de la duración de las titulaciones permitirá a las universidades realizar recortes de plantilla docente.

   El ministerio, en cambio, asegura que la reducción de los grados supondrá "un ahorro para las familias", dado que sus hijos no tendrán que estudiar un año "adicional" que no existe en otros países de Europa en los estudios de grado; y cree que la implantación de los nuevos grados mejorará la internacionalización de los estudios españoles y la movilidad de los estudiantes, como principales ventajas del decreto.

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