El alcalde de El Puerto de Santa María, Alfonso Candón, ha anunciado que Mar Cristal Marilum, la empresa del archiconocido cocinero portuense Ángel León, gestionará el Molino de Mareas El Caño para la puesta en marcha de un laboratorio de investigación gastronómica que se centrará en la gastronomía y restauración basada en recursos marinos, formación y capacitación hotelera, emprendimiento y vivero de empresas, así como actividades culturales y de uso público.
Así lo ha decidido la Mesa de Contratación reunida esta mañana que ha dado por buena la oferta presentada y que ahora elevará a la Junta de Gobierno Local para que la adjudicación sea definitiva. El alcalde explica que nuestro cocinero internacional más importante, con dos Estrella Michelín, será el encargado de desarrollar este ambicioso proyecto en uno de los más sobresalientes Molinos de Mareas de la Bahía gaditana, ubicado en las cercanías de la Estación de Ferrocarril, junto al antiguo Matadero. En esta construcción, emplazada sobre un antiguo caño del Río Guadalete, que ha sido rehabilitada por Demarcación de Costas gracias al empuje del Gobierno de España, será donde Ángel León, embajador de la gastronomía portuense con distinciones internacionales, materialice uno de sus proyectos más ambiciosos y que, sin duda, se convertirá en un atractivo turístico y referente importante para todos los amantes de su cocina, así como compañeros del sector y futuros cocineros. Alfonso Candón señala que la concesión será por treinta años, sin que se contemple posibilidad de prórroga alguna, con una licitación anual de 5.852,58 euros, cumpliendo con la Resolución de la Delegación Territorial de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en Cádiz, de autorización de uso de la zona de servidumbre de protección del Dominio Público Marítimo Terrestre y de la concesión de 806,30 metros cuadrados de bienes de dominio público terrestre por un plazo de 30 años, hasta el 8 de agosto de 2044.
El Molino es una sólida construcción de dos plantas, edificada con sillares de piedra ostionera, emplazada de manera transversal sobre un caño que confluye con el río Guadalete en las cercanías del puente del ferrocarril, aguas arriba del antiguo Puente de San Alejandro. Aunque actualmente se le conoce como Caño del Molino era denominado en el siglo XIX como Caño de la Madre Vieja, al ser éste un antiguo cauce del río Guadalete. Su emplazamiento es perpendicular al caño secundario del río Guadalete, disposición que le permitía ejercer de tapón del cauce del caño para embalsar el agua en su estanque durante la pleamar. De base rectangular, consta de dos edificios unidos con dos plantas cada uno
. En la primera, junto a distintas dependencias, se encontraba el taller de molienda, la amplia estancia que albergaba las piedras trituradoras y el taller de clasificación de harinas. En la segunda, las habitaciones y vivienda del administrador, el granero y la azotea.
El alcalde de El Puerto insiste en señalar que gracias a la rehabilitación del edificio dos siglos después de su construcción y ahora con esta iniciativa y emprendimiento de Ángel León no volverá a caer en el olvido este importante elemento del patrimonio hidráulico y arqueológico de la industria no sólo portuense, sino de toda la comunidad andaluza.
La apuesta del Ayuntamiento de El Puerto y la firme oferta de Ángel León consiguen, así, incrementar el patrimonio cultural, económico, gastronómico y medioambiental de la ciudad, convirtiendo a El Puerto en un centro nacional e internacional en la materia, foco de atracción de turistas y visitantes, revulsivo económico y motor de dinamización y conservación medioambiental.