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El Puerto

Lo que yo te diga... de la Patrona

Luis Miguel Morales VS Quique Pedregal.

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Luis Miguel Morales | De convicciones cristianas muy marcadas -algún día explicaré y sorprenderá a buen seguro mis inicios- no quisiera dejar pasar la oportunidad como creyente mi total desacuerdo de cómo de un tiempo a esta parte se ha utilizado la imagen de la Patrona para fines políticos y de cómo hasta en eso está sirviendo para fragmentar y buscar el rédito electoral.

Triste por lo que han dicho y por lo que han omitido casi todos. Y es que, querido Quique, la política todo lo politiza. Todo. La Iglesia no podía ser menos. Tampoco a ésta le ha importado mucho cuando ha salido ganando. La apología de símbolos ha sido desde tiempos inmemoriales un capítulo que unos y otros han sabido mover y manipular como pez en el agua. 

Cierto que la ciudad necesita una mejor optimización de los recursos públicos de los que hasta la fecha ha dispensado. Cierto. También desearía trasparencia. Quiero una festividad de la Patrona acorde a ésta y a la devoción que de ella le profesan miles de portuenses.

También desearía que la dignificación sea correspondida por los políticos de turno. Respeto.
No quiero favores ni charangas venidas a menos, no deseo que me dulcifiquen con palabrerías vanas cómo la tijera menosprecia y rebaja una tradición de la forma más ruin y comercial. El doble lenguaje del quiero pero no puedo empieza a no calar.

Nuestra Señora de los Milagros debe ser algo más que una excusa, un motivo, para que me recuerden lo bien que lo hacían unos y lo rematadamente mal que lo hacen otros. Hay tiempo para la rectificación.

Estamos en septiembre no lo olviden, aún queda mucho camino por andar, demasiado aún por decidir como para que a estas alturas la travesía del desierto nuble la vista. Gastar por gastar no tiene sentido y si es de demasiado es de irresponsable. Igualmente, recortar por diferenciar lo anterior es de ser ventajista y demagogo.

La mujer del César no sólo debe ser honrada, sino parecerlo. Un Gobierno creíble debe dar razones para justificar sus decisiones. Luz y taquígrafo. Todos saldremos ganando. Y no, no me gusta que utilicen a la Virgen, a la Patrona y mis creencias para un uso partidista.

Si quieren unas instituciones laicas atrévanse a dar el primer paso, sean valientes, den ejemplo sepan lo que van a ganar y lo dispuestos que están de perder.

Lo que yo te diga, me siento a esperar.

Quique Pedregal | Como ciudadano portuense, fundador de la hermandad del Resucitado y hermano mayor de la misma durante diez años, como católico practicante, como defensor de las tradiciones que no hacen daño a nada ni a nadie, como abanderado del soplo de aire fresco que el Papa Francisco -jesuita tenía que ser (Compañía de Jesús, organización religiosa donde tengo grandes amigos que me enseñaron unos valores, una forma de pasar por la vida, una manera de tratar a los demás desde el respeto, la tolerancia, el amor y la transigencia)- está exhalando hacia todos los confines del mundo, del ‘orbe’ que queda más rimbombante, y dejando de lado mi labor profesional, tengo que estar en desacuerdo con los recortes en la festividad de la Virgen de los Milagros.

Soy de los que opina que el ahorro, del que todavía no hemos visto ni un papel, ninguna documentación ni fotocopia, está por ver. ¿Puede alguien decirme dónde se va a emplear, en qué partida, el dinero que sobre o que no se gaste? ¿Se va a disminuir el presupuesto para el año 2016? ¿Se va a engrandecer el Carnaval o la Feria? ¿Se van a tapar los boquetes que aparecen por doquier o se va a hacer una limpieza profunda de calles y aceras de la ciudad para evitar resbalar con las defecaciones de los canes?

Más aun, ¿se va a dotar de vivienda, albergue, comida o ropa a los indigentes que desgraciadamente tiene que dormir a ras de suelo?

¿Alguien podría decir algo o nos quedamos solo con que se va a quitar presupuesto de la Patrona –hermandades, prepárense- ‘sine die’?

Nunca he estado a favor de las subvenciones, y eso lo saben los hermanos mayores que compartieron conmigo aquellos años de vida cofrade. Me niego a que una hermandad reciba dinero si en la esquina del edificio consistorial duerme una persona tapada con un cartón.

Por favor, ahorren en lo que quieran, recorten de donde les parezca, pero destinen lo que sobre a necesidades de verdad… y olvídense de la política. La ayuda al prójimo no sabe de derechas ni de izquierdas. Gobierno y oposición, abran las puertas y muéstrense tal como pregonan, con transparencia.

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