Cientos de miles de iraníes acudieron hoy a la Universidad de Teherán, donde el líder supremo del país, Ali Jamenei, encabezó las honras fúnebres del expresidente Akbar Hashemí Rafsanyaní, fallecido de un infarto el pasado domingo.
Las calles adyacentes estaban cortadas, mientras cientos de miles de personas abarrotaban las avenidas que conducen a la universidad en el centro de la capital.
Pancartas con los retratos del imán Jomeini y Rafsanyaní juntos proliferaban en las manifestaciones de duelo por el que fuera considerado la mano derecha del líder de la revolución islámica de 1979.
Los concentrados coreaban llamadas a la resistencia y elogios al fallecido, miembro del círculo más cercano de Jomeini y dos veces presidente del país.
Algunos manifestantes también vociferaban consignas con los lemas reivindicativos del movimiento verde que encabezó las protestas reformistas de 2009, sofocadas tras su contestada reelección por el entonces presidente, Mahmud Ahmadineyad.
El líder supremo acudió al centro universitario para dirigir el rezo multitudinario del poderoso clérigo.
Según anunció Hamzeh Jalili, portavoz del Consejo del Discernimiento, órgano que presidió Rafsanyaní hasta su muerte, tras la oración saldrá la procesión fúnebre.
El exmandatario será enterrado en el mausoleo del fundador de la República Islámica, al sur de la capital, por petición de la familia de Rafsanyaní.
Las autoridades han decretado tres días de luto oficial y hoy es festivo en coincidencia con las exequias.
Rafsanyaní fue uno de los pilares de la revolución de 1979 y de la formación de la República Islámica, en la que ocupó los principales puestos de responsabilidad del país a lo largo de su carrera.
Fue presidente durante dos mandatos, entre 1989 y 1997, y encabezó la influyente Asamblea de Expertos entre 2007 y 2011, un órgano entre cuyas atribuciones figura el control y, de ser necesaria, la destitución y elección del líder supremo.
Jameneí calificó ayer de "compañero de lucha y amigo" a Rafsanyaní, recordando los 59 años de colaboración entre ambos.
El ministro de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, definió por su parte a Rafsanyaní como "un gran científico, un distinguido ulema, un guerrero incansable y el amigo de toda la vida del imán Jomeiní y del líder supremo (Jameneí)".