Moscú y Kiev pactaron hoy, con la mediación de París y Berlín, un nuevo alto el fuego en el este de Ucrania que debe entrar en vigor este lunes 20 de febrero.
Según informaron los ministros de Exteriores de Francia y Alemania, Jean-Marc Ayrault y Sigmar Gabriel, sus homólogos ruso y ucraniano, Serguéi Lavrov y Pavlo Klimkin, llegaron a este acuerdo en una reunión en el marco de la Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC).
El objetivo de esta nueva tregua, que sucede a otros muchos intentos frustrados de frenar las hostilidades en el este de Ucrania en los últimos meses, es poner fin a "la fuerte escalada" de la violencia que se está registrando en la región del Donbas, explicó Gabriel.
El ministro alemán habló de "una buena atmósfera" en el encuentro y su colega francés aseguró sentirse "satisfecho" tras la reunión, en la que también se acordó una nueva cita "en pocas semanas" en este mismo formato para tratar de hace avanzar el Acuerdo de Minsk, bloqueado desde hace meses.
Durante la nueva tregua deberían volverse a retirar de la denominada "línea de contacto", el frente entre el ejército ucraniano y los rebeldes separatistas apoyados por Moscú, las armas pesadas.
Asimismo, ambas partes se comprometen en este nuevo período de distensión a permitir el acceso a los observadores de la OSCE, que deben comprobar en el terreno que se cumple con la tregua, y al personal de la Cruz Roja, para que suministre ayuda humanitaria a la población civil.
Ayrault recalcó además que "no hay alternativa a Minsk", en relación al acuerdo pactado por Moscú y Kiev con la mediación franco-alemana a principios de 2015 y que no ha conseguido despegar por las reticencias de ambas partes.
Según ambos ministros, EE.UU. no está planteándose participar en las negociaciones en torno a Ucrania, pese a los rumores en este sentido que se han difundido en los últimos días.
El anuncio de la nueva tregua coincidió casi en el tiempo con el anuncio por parte del Kremlin de un decreto del presidente ruso, Vladímir Putin, que ordenó reconocer los documentos de los habitantes de las zonas bajo control separatista en el este de Ucrania.
El decreto, agrega el comunicado, beneficiará a aquellos "ciudadanos de Ucrania y personas sin ciudadanía que vivan permanentemente en ciertas zonas de las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk", de forma que los afectados "pueden entrar y salir de Rusia sin necesidad de formalizar un visado sobre la base de los documentos de identidad".