De locos. El partido entre el Sevilla Atlético y el Cádiz se lo pudo llevar cualquiera y terminó en un espectacular empate a tres que en su desarrollo fueron provocando una catarata de sensaciones contrapuestas a ambas aficiones.
Los minicracks del Sevilla, salvados y sin presión, se vinieron arriba al verse ante un graderío poblado como pocas veces habían disfrutado antes. Enfrente, un Cádiz al que le sigue faltando gasolina en este final de temporada, pero que sacó fuerzas de flaqueza para rascar un punto cuando todo parecía perdido con el 3-1.
Aunque el sevillista Marc Gual dispuso de la primera ocasión a los cinco minutos, un remate en plancha que detuvo Cifuentes, fueron los gaditanos los que dominaron la primera media hora, eso sí, sin crear excesivo peligro salvo sendos remates de Ortuño: un remate con la izquierda a quemarropa sin tiempo para armar la pierna que se marchó desviado y un cabezazo en plancha a centro de Salvi que rozó el poste.
Quien no perdonó fue Gual, en racha sobre todo en casa. En apenas ocho minutos marcó por partida doble y asestó dos puñetazos al rostro del cadismo, que se iba al descanso con un 2-0 que no auguraba nada bueno.
Primero marcó Gual con un disparo desde cerca con la derecha al recoger un pase de Ivi y acto seguido, al rematar en el punto de penalti una asistencia de Borja Lasso, genial, con el tacón.
Aketxe sacó el cañón
El Cádiz acortó distancias en su primera acción ofensiva al regreso de los vestuarios gracias a la maestría de Aketxe, quien clavó en toda la cruceta del meta Caro un libre directo primorosamente ejecutado con su pie izquierdo.
Álvaro Cervera, técnico cadista, quiso cambiar el signo del encuentro con dos cambios pero apenas hubo tiempo para ver si surtían efecto, ya que una carga de Aridane sobre Matos propició el penalti mediante el que Ivi, con su ejecución rasa y pegada al palo izquierdo, volvió a ensanchar la ventaja (3-1).
El Cádiz no se rindió e intentó volver a meterse en el partido de la mano de Álvaro García, que primero rozó el gol con un remate lejano tras una dejada de cabeza de Ortuño y poco después marcó desde fuera del área con un zurdazo cruzado que no alcanzó Caro, recomponiéndose tras una mala salida a pies de Gorka Santamaría.
Los bisoños futbolistas locales parecían atenazados por el miedo a batir a un Cádiz que, en el tramo final, jugaba espoleado por sus numerosos aficionados presentes y que empató por medio de Rafidine Abdullah, al remachar el centrocampista comorense una acción confusa a la salida de un córner.
Ambas escuadras buscaron el cuarto gol y el público no ganaba para sustos, sobre todo el gaditano, ya que el Cádiz se juega la fase de ascenso y el Sevilla Atlético nada en absoluto. Así las cosas, un disparo al poste de Curro y un paradón de cada portero fueron las últimas acciones destacables de un partido que hizo reír, llorar, disfrutar y sufrir en porcentajes prácticamente idénticos.
- Ficha técnica -
–Sevilla Atlético– Caro, Carmona, Matos, Bernardo Cruz (Diego González, min. 53), Cotán (Yan Eteki, min. 90), Borja Lasso, Ivi, Fede, Álex Muñoz, Marc Gual y Pozo (Curro, min. 73).
–Cádiz CF– Cifuentes, Carpio, Aridane (Santamaría, min. 69), Sankaré, Brian Oliván, Garrido (Abdullah, min. 54), José Mari, Salvi (Aitor, min. 54), Álvaro García, Aketxe y Ortuño.
Goles:
1-0 Caro (min. 34)
2-0 Rafa (min. 42)
2-1 Aketxe (min. 54)
3-1 Ivi (penalti, min. 61)
3-2 Álvaro García (min. 72)
3-3 Abdullah (min. 80)
Árbitro: Díaz de Mera, Isidro (Comité Castellano-Manchego). Mostró cartulinas amarillas a Fede (min. 23), Bernardo (min. 32), Pozo (min. 65), Cifuentes (min. 77), Ivi (min. 78), Aitor García (min. 93) y Yan Eteki (min. 94).
Incidencias: 18.169 espectadores en el estadio Sánchez Pizjuán de Sevilla, de ellos casi 8.000 eran aficionados cadistas.