La ola de calor que se ha instalado en nuestro país y que parece que no nos abandonará hasta la próxima semana ha dejado un jueves en Sevilla con varias horas rondando los 43 grados de temperatura y con mínimas sin descender de los 22, calor soporífero que no será tan intenso este vienes aunque las temperaturas sigan rondando los 40 grados. Y por la noche, sin bajar tampoco de los 20 hasta el miércoles, según la Aemet.
Sevilla, ciudad y provincia, ha vivido este jueves su aviso rojo con máximas de 43 grados tanto en el aeropuerto de San Pablo como en Tablada, aunque no ha registrado ningún récord de temperaturas absolutas, como sí lo han hecho otras zonas, entre ellas Córdoba capital con 46,8. En la capital no se han alcanzado los 46,6 que marcaron los termómetros el 23 de julio del año 95 en el aeropuerto pero antes de las dos de la tarde los termómetros ya superaban los 40 y la misma sensación se mantenía hasta las dos de la tarde.
Las temperaturas superiores a los 40 se han registrado a lo largo de toda la provincia y durante buena parte del día ha sido un infierno estar en localidades como Écija, con la máxima en la provincia de 45,4), Osuna (con 45,3), La Roda de Andalucía (45) o Morón de la Frontera (43,8), donde ayer fallecía un operario que asfaltaba la carretera de la localidad, probablemente por un golpe de calor, misma patología que registra otro albañil ingresado en el hospital e Don Benito (Badajoz) tras sufrir un golpe de calor cuando trabajaba en la reparación de un acerado en Cabeza del Buey.
Sopor y mucha foto
La sensación de sopor en la ciudad se ha incrementado además con una leve brisa que, en lugar de refrescar, incrementaba aún más la sensación térmica, que en ocasiones se acercaba a la irreal que marcan los termómetros de Sevilla, a los que nadie se ha resistido a dejar de sacar su instantánea particular, fotografía que en algunos casos superar los infernales 50 grados.
Pero el calor del día no pasa por la noche, con temperaturas que se mantienen hasta primeras horas del alba por encima de los 23-24 grados y que sólo bajan y algo un par de horas, justo antes de volver a encarrilar la senda de los 40 grados, cifra que superaremos, como es el caso de este mismo viernes, o rondaremos, al menos hasta el martes, cuando ya la Aemet informa que las temperaturas volverán a los 38 livianos grados durante el día y, por la noche, a dormir bajo los amable 19 para conciliar, de verdad, el sueño.
