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El PA quita a Guerrero de portavoz por sus ?continuas salidas de tono?

El partido le acusa de defender más los posicionamientos del PP que los de su propia formación

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  • Manuel Guerrero y Estefanía Benítez en el último Pleno de junio. -
Las aguas bajan revueltas en el seno del PA de Chiclana. Y se veía venir. Los votos enfrentados de los dos únicos ediles de esta formación, Estefanía Benítez y Manuel Guerrero, en los últimos plenos evidenciaban una profunda fractura interna y hacían presagiar que algo iba a ocurrir. Y así ha sido.

El comité local ha decidido retirar a Guerrero de portavoz del Grupo Municipal Andalucista “por sus reiteradas salidas de tono y por su falta de disciplina con el partido”, al considerarlo como único responsable de esa falta de unidad de voto. La decisión, ratificada en Asamblea Local por un 85 por ciento de los asistentes, se hará efectiva en los próximos días, por lo que el cargo será asumido por Estefanía Benítez y Guerrero quedará únicamente como concejal.

El secretario de organización del comité local, José María Fernández Oliván, acusó al edil de “defender más los posicionamientos del PP que los de su propio partido”. Así recordó, por ejemplo, el episodio en el que se debía nombrar a un juez instructor de la oposición para la concesión de la insignia de oro de la ciudad, “y votó a favor de que fuera alguien del PP en lugar de su compañera del PA. Eso es de Berlanga”, dijo. Este hecho, no obstante, ha sido desmentido por el propio Guerrero.

Fernández Oliván rememoró además otros dos "espectáculos" plenarios que protagonizó su formación. El primero se produjo en la sesión ordinaria de mayo en un punto para ayudar económicamente al geriátrico del Novo de Sancti Petri. Benítez votó a favor y Guerrero se abstuvo. La historia volvió a repetirse en el Pleno de junio pero esta vez en un punto para eliminar el recargo del IBI. "En ese afer sentimental político que tiene con el PP volvió a coincidir con ellos en el voto absteniéndose, mientras que su compañera votaba a favor".

Por estos hechos, el comité local acordó hasta en cinco ocasiones retirarle la portavocía, pero en ninguna de ellas Guerrero acató la decisión y solicitó que se convocase una Asamblea Local. Ahora este órgano ha ratificado el cambio de portavoz en favor de su compañera de partido. "Confiamos en que no haya ningún problema y haga caso al acuerdo. Si insistiera en seguir como portavoz nos veríamos ante el dilema de expulsarlo", señala el secretario de organización.

Fernández Oliván se mostró ayer muy crítico con el edil y le acusó de “haber perdido el norte y de responder únicamente al partido MGS (Manuel Guerrero Sigler). Siempre es yo, yo y yo”. Aún así, quiso dejar muy claro que el motivo de apartarle de la portavocía no tenía nada que ver “con que hable con errores gramaticales y de aquella manera”. “Es evidente que el nivel de facilidad de palabra de Benítez dista mucho del de Guerrero, pero no ha sido por eso. No ha sido una decisión caprichosa”, explicó.

VIENE DE LEJOS

Por su parte, la que será la nueva portavoz del partido, Estefanía Benítez, aseguró que la situación era desde hacía tiempo insostenible. “Lo he pasado muy mal con él. Ha sido como estar sola porque él iba por libre. Si me habéis visto que iba al cuarto de baño muchas veces en los plenos es porque tenía que relajarme y contar hasta diez para aguantarlo”.

Ambos políticos reconocen que la actitud de Guerrero no les ha pillado de sorpresa. "Tuvo problemas en el PSOE, en el PSA y en CCOO. Algo tendrá el vino cuando lo bendicen", ironizó Fernández Oliván. Aún así aceptaron que fuera cabeza de lista porque no pensaron "que se fuera a desmarcar tanto".

"Yo llevaba muchos años queriendo ser militante del PA y por eso acepté ir de segunda con Guerrero a sabiendas del peligro que corría. Por las siglas dije que sí, pese a que el candidato no era el que yo consideraba más adecuado", cuenta Estefanía Benítez.

Pese a toda esa supuesta falta de disciplina, el partido no le ha abierto ningún expediente sancionador ni quiere, de momento, expulsarlo, aunque deja abierta la posibilidad si “vuelve a votar por libre”. “Le damos una última oportunidad. Si es tan andalucista como dice, no tendrá ningún problema en trabajar por el partido únicamente como concejal. La voluntad de esta formación es no echar a nadie. Nuestro deseo último es que haga algo tan simple como aceptar las normas de convivencia y de política de esta organización. Estaríamos encantados de que siga la línea de este partido. Y si no quiere hacerlo tendríamos que tomar medidas, aunque para nosotros es más cómodo que se vaya que echarlo”, concluyen.


MANUEL GUERRERO: "Todo esto lo hacen por dinero"

Por su parte, el edil y todavía portavoz del grupo municipal del PA, Manuel Guerrero, ha acusado al comité local y en concreto a su compañera de partido de querer retirarle de la portavocía “únicamente por dinero”. “Desde que se enteró de que el equipo de Gobierno quería liberar a los portavoces de todos los grupos políticos, incluidos los de la oposición, empezó a interesarse por ser la portavoz”, apunta. Y es que de producirse esa liberación los portavoces pasarían a cobrar más de 3.700 euros al mes, casi el triple de lo que perciben ahora. "Cómo se explica si no que sea precisamente ahora cuando muestre interés por ser portavoz. Cuando estábamos en el Gobierno que los dos éramos liberados no le interesaba".

El concejal asegura que siempre ha votado siguiendo las directrices del comité provincial. “En una ocasión (en la del geriátrico) la que cambió el voto fue ella y lo puedo demostrar porque tengo los papeles. Por eso no se han atrevido a abrirme expediente. Todo esto ha sido una maniobra muy bien montada para echarme de portavoz haciendo ver que yo soy el que me he desvinculado del partido”. Pese a lo anterior, Guerrero asegura que no tendrá “inconvenientes” en acatar la decisión y seguir como concejal a secas "siempre que se queden claras las cuentas del grupo". Si eso es así, “seguiré trabajando por Chiclana como he venido haciendo hasta ahora. Yo no tengo ningún interés económico, así que estoy muy tranquilo. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio”.

No obstante, deja una puerta abierta a una posible impugnación del acuerdo adoptado por la Asamblea. "En el censo había unas 30 personas y fueron unos 23 los que votaron, pero de esos algunos no tenían derecho. Votaron familiares de Estefanía que no estaban en el censo, así que podría impugnarlo. Voy a consultar esa posibilidad", adelantó el edil.

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