Un tribunal de Pakistán emitió hoy órdenes de arresto con posibilidad de fianza contra el ex primer ministro del país Nawaz Sharif por no comparecer ante la sala que lo juzga por tres casos de supuesta corrupción.
El juez Mohamed Bashir emitió las órdenes de arresto contra el exgobernante en dos de los tres casos, dijo a Efe una fuente de la tribunal del Buró de Responsabilidad Nacional (NAB, órgano anticorrupción), que prefirió mantener el anonimato.
Antes, el juez había rechazado una petición de la defensa para que Sharif quedará exento de presentarse ante el tribunal debido a que su esposa, Kulsoom, se encuentra en Londres siendo tratada por un cáncer de garganta.
Una hija de Nawaz, Maryam y el marido de ésta, Mohamed Safdar Awan, sí asistieron a la vista de hoy, que fue aplazada hasta el próximo 3 de noviembre.
"Todos sabemos por qué Nawaz no está en el país, su esposa no se encuentra bien. Si Musharraf puede escapar del país por un dolor de espalda, Nawaz Sharif tiene un motivo genuino", dijo Maryam a las televisiones en la puerta del tribunal tras la vista.
La hija del exgobernante hacia referencia a que el exgeneral y expresidente Pervez Musharraf salió el país en marzo de 2016 alegando motivos médicos cuando estaba siendo juzgado por alta traición y el asesinato de la ex primera ministra Benazir Bhutto, y no ha vuelto a Pakistán.
Sharif, Maryam y Safdar fueron imputados por supuesta corrupción el 19 de octubre por la propiedad de pisos en una exclusiva zona de Londres y las fábricas Azizia Steel y Hill Metal en Arabia Saudí.
Un día más tarde, el exgobernante fue imputado en un tercer caso por su relación con la compañía de Flagship Investment, cuya presidencia ocupó hasta 2014, mientras mantenía cargos públicos y otras 15 empresas en el extranjero.
Dos hijos de Nawaz, Hassan y Hussain, también están siendo investigados por sus vínculos con esas compañías, pero no se han presentado a ninguna de las seis vistas del tribunal hasta ahora y han sido declarados prófugos.
El NAB inició los tres casos de corrupción siguiendo un dictamen del Tribunal Supremo del 28 de julio en el que inhabilitó por falta de honestidad al político, quien dimitió ese mismo día.
Tras seis meses de investigaciones iniciadas a causa de los Papeles de Panamá, la máxima instancia judicial inhabilitó al primer ministro por no incluir en su declaración de ingresos un salario que ya no recibía de una empresa de un hijo en Emiratos Árabes Unidos, lo que el Supremo consideró como prueba de su falta de "honestidad".