La Junta de Gobierno Local ha aprobado iniciar el expediente para nombrar a la bailaora Angelita Gómez Hija Predilecta de la Ciudad, conforme a los requisitos y trámites determinados en el Reglamento Municipal Especial de Honores y Distinciones y a petición de la delegación de Dinamización Cultural. Así como designar como juez instructor del expediente al teniente de alcaldesa de Urbanismo, Dinamización Cultural, Patrimonio y Seguridad, Francisco Camas.
“La bailaora jerezana ha recorrido miles de kilómetros difundiendo el flamenco de Jerez por todo el mundo"El teniente de alcaldesa destaca que en Ángeles Gómez Sánchez, Angelita Gómez, concurren méritos más que suficientes para seguir distinguida con dicha condecoración. “Angelita está considerada una figura fundamental del flamenco de Jerez y una gran maestra del baile con proyección internacional, que avalan los numerosos los premios que ha recibido en reconocimiento a su labor artística y pedagógica”.
Camas señala igualmente que “la bailaora jerezana ha recorrido miles de kilómetros difundiendo el flamenco de Jerez por todo el mundo. Junto a sus cualidades para el baile, ha desarrollado a lo largo de su trayectoria profesional, una brillante carrera como pedagoga tanto en los cursos de verano organizados por la Cátedra de Flamencología de Jerez como desde su propia academia”.
La solicitud del nombramiento, que partió de la Cátedra de Flamencología, ha contado con numerosos apoyos tanto de entidades como el Consejo Regulador y el Centro Andaluz de Flamenco como de peñas flamencas, escuelas de enseñanza de cante, baile y guitarra, salas de espectáculos, tablaos flamencos y tabancos, medios de comunicación y prensa especializada, artistas, productores y bodegas. Así como también ha contado con el apoyo de los componentes de la Mesa del Flamenco y el Consejo Consultivo y numerosos particulares.
Ángeles Gómez Sánchez, jerezana de nacimiento, empezó a bailar flamenco a la edad de cinco años con profesores como María Pantoja, La Gitana Blanca y Sebastián Núñez, todos ellos ya desaparecidos, que supieron enseñarle muchos de los secretos que encierra el baile flamenco de cuño jerezano.
Con sólo 11 años dio su primer recital y con él adquirió en algunos ambientes una merecida fama de niña prodigio. Así lo afirma, por ejemplo, el flamencólogo Manuel Ríos Ruiz, debido sobre todo al tipo de bailes que interpretaba la niña Angelita: caracoles, mirabrás, soleás, seguiriyas, tarantos, farrucas y bulerías.
Allá por los años sesenta actúa con algunas de las principales figuras de la época: con los cantaores Terremoto de Jerez, con Tío Borrico, con Sernita de Jerez, con El Sordera y en 1962 gana el Premio Paco Laberinto de Bulería en el Concurso Nacional de Arte Flamenco celebrado en Jerez. Desde entonces, Angelita Gómez ha bailado en numerosos cuadros flamencos, tanto en España como en otros países de Europa y, sobre todo, de América del Sur.
Pero junto a sus cualidades para el baile, especialmente para la personal e inigualable bulería de Jerez, desde muy pronto empezó a desarrollar una brillante carrera como pedagoga, tanto en los afamados cursillos de verano que organizaba la Cátedra de Flamencología de Jerez como desde su propia academia que, a lo largo de dieciocho años, se fue convirtiendo en una de las principales metas de un gran número de aficionados de todos los continentes.
Retirada ya del baile activo, Angelita vive entregada a la enseñanza y, desde su primera edición, sus cursos de bulerías del Festival de Jerez gozan de una gran popularidad.
Su labor como pedagoga ha obtenido numerosos reconocimientos, del Ayuntamiento de Jerez y el Premio de la Federación Provincial y Local de Peñas Flamencas. Recientemente, la Cátedra de Flamencología de Jerez ha reconocido y recompensado su magisterio otorgándole el Premio Nacional de Enseñanza del Baile Flamenco.
Durante la VIII edición del Festival de Jerez, de forma excepcional, volvió a bailar en el escenario del Villamarta, donde cosechó uno de sus más grandes triunfos con el espectáculo. La bailaora volvió de nuevo a colaborar en ¡Viva Jerez!, espectáculo que inauguró la XII edición del Festival.
En 2010 recibe el "Premio Demófilo" en la novena edición de los Premios de Arte Flamenco otorgado por la Fundación Machado, por su larga trayectoria artística y por su dedicación, según el jurado, a transmitir con honestidad y excelencia los fundamentos del baile de Jerez.