Con la Plaza de Las Angustias ya prácticamente semipeatonalizada a falta de los últimos retoques, que estarán listos para la próxima semana, el Ayuntamiento culmina una parte del triángulo Angustias-Corredera y Plaza Esteve. Para ello, proyecta una nueva imagen, en aras de la integración de estos espacios y el arreglo de la calzada, ante el mal estado que acusa el adoquinado, muy deteriorado por el paso de vehículos pesados y autobuses. Se trata de una actuación encaminada a dinamizar el centro que no ha hecho más que empezar.
A partir de ahora, el Ayuntamiento pone el foco en estos dos últimos enclaves, mientras los técnicos de Urbanismo terminan de redactar el proyecto. En estos momentos, tal y como precisa el teniente de alcaldesa delegado de Movilidad, José Antonio Díaz, se encuentra al 95% de su ejecución, tras haber sido objeto de unas modificaciones para actuar también en el acerado, lo cual no estaba contemplado inicialmente.
“El proyecto se ha reformulado con todo el tema del acerado y ahora se mejorará al completo”, detalla el delegado sobre esta intervención, para la que se proyecta una inversión de 600.000 euros con cargo a los fondos europeos Edusi, y que está sujeta a la aprobación de los presupuestos para 2019, que van a Pleno esta semana.
Si todo va bien, los planes del Gobierno municipal socialista pasan por tener listo a final de mes el proyecto, que es cuando tienen previsto para presentarlo en el mes de abril a comerciantes y vecinos para que realicen sus aportaciones. El plazo que barajan para comenzar las obras, una vez que el proceso administrativo para licitar y adjudicar los trabajos arranque sobre mayo, es agosto, al considerar la fecha más idónea por haber menos tránsito de vehículos por las vacaciones de verano. No obstante, todo dependerá de cómo trascurra el proceso y de las empresas que se presenten al concurso, pues no hay que perder de vista que en el caso de Las Angustias fueron 11 las entidades que pujaron.
Tampoco está claro cuánto durará la obra -entre tres y cinco meses- que se acometerá por fases y arrancará por la calzada para ocasionar las menores molestias posibles. Lo que sí se sabe es que en este caso no habrá que actuar en el subsuelo, como ha ocurrido en la Plaza de Las Angustias, que han sido objeto de obras de canalización, y que desde hace unos días luce una nueva imagen
Fórmulas para reducir el impacto acústico
El proyecto contempla mejorar el adoquinado en ambos viales de Esteve y Corredera, incorporándole sendas bandas de rodaduras por la que podrán transitar los vehículos, a fin de reducir la contaminación acústica por el fuerte impacto sonoro que se genera en estos enclaves. No obstante, Díaz no descarta que a esta fórmula para reducir el ruido se sumen otras nuevas.También se prevé ampliar el acerado de Santa María, eliminando uno de los carriles.
“El tramo de la calle Frías y Mirabal lleva 20 años asfaltado”
El delegado de Sostenibilidad, Participación y Movilidad, José Antonio Díaz, ha achacado a la “hipocresía” las críticas que han realizado esta semana Ciudadanos Jerez e Izquierda Unida por el asfaltado del tramo comprendido entre calle Frías y Plaza Mirabal, en Intramuros. Ambas formaciones han pedido más sensibilidad para el centro histórico, mientras que la Asociación de Vecinos Centro Histórico ha anunciado que denunciará el caso en la Consejería de Cultura por haberse obviado que se trata de un conjunto histórico artístico protegido. En este sentido, Díaz ha defendido la actuación realizada y ha advertido que este tramo de cien metros “lleva 20 años asfaltado” y detalla que la intervención se ha llevado a cabo después de haber realizado una canalización de gas natural. “Después se repuso al estado natural en el que estaba, que era asfaltado y no adoquinado, en vez de dejar el parche”, señaló tras dejar claro que “hay más calles asfaltadas en Intramuros”, sentencia.