“Apartamento para veraneo, una habitación, un baño, gran terraza, totalmente amueblado y a tres minutos de la playa Victoria. Disponible julio y agosto: quincenas a 1.200 euros y mes entero 2.200 euros”. Llega el verano y con él el problema de la vivienda en Cádiz se incrementa aún más si cabe. Si ya es difícil encontrar un piso asequible en la capital gaditana durante cualquier fecha del año, cuando se acercan los meses estivales se convierte en misión imposible. Los anuncios para alquileres vacacionales empiezan a proliferar y se repiten también aquellos que especifican claramente la temida frase del que busca un lugar para vivir: “sólo para temporada escolar”.
Esto provoca que no sean pocos los que se ven obligados a trasladarse constantemente de piso, ya que deben abandonar la residencia que ocupan de septiembre hasta junio para dejarlo libre durante julio y agosto, bien para que lo habite el propietario o para que este lo arrende a un tercero para ese período. El precio del alquiler en estos meses llega a duplicarse e incluso triplicarse, lo que conlleva un gasto muy difícil de asumir. Este problema no sólo afecta a estudiantes o profesores de fuera que quieran o necesiten alargar su estancia de forma anual, sino que también perjudica a inquilinos gaditanos que deben hacer dos mudanzas al año.
Si quieres quedarte a vivir en Cádiz por una larga temporada, en el portal de alquiler Idealista solo encontrarías actualmente once pisos por menos de 600 euros. La gran mayoría de anuncios que se publican en estos días advierten de que se trata de alquiler por varios meses. Pero, ¿hasta dónde esto es legal? Hace apenas tres meses hubo un nuevo decreto del alquiler en el que una de las medidas dispuestas fue la ampliación de tres a cinco años de la prórroga obligatoria de la duración de contrato. Sin embargo, también existe el contrato de temporada, que se rige por una legislación diferente. De este modo, este contrato en realidad no está regido por ninguna ley, sino por las cláusulas que pacten el arrendatario y el arrendador en el contrato de arrendamiento.
La turistificación ha provocado un notable incremento del alquiler medio. Más todavía si tenemos en cuenta que entre las 10 provincias más caras se sitúan las costeras Málaga (con un precio medio de 1.557 euros por alquiler mensual) o Cádiz (967 euros), tal y como indica el Informe Trimestral sobre el Precio de la Vivienda en España de la empresa de anuncios clasificados Mitula. Porque los apartamentos turísticos en la ciudad siguen y siguen aumentando.
