El PSOE ha puesto en marcha la campaña #PueblosConVida para reclamar al gobierno provincial de la Diputación que garantice cajeros automáticos en todos los municipios de la provincia de Málaga. El portavoz socialista en la institución provincial, José Bernal, y la diputada provincial, Gema Ruiz, han presentado esta iniciativa en los municipios de la Serranía de Ronda de Faraján y Pujerra.
“Lo que vamos persiguiendo es que la Diputación lleve a cabo medidas oportunas para que todos los municipios de la provincia tengan cajeros automáticas y servicios bancarios para seguir luchando contra la despoblación”, ha asegurado Bernal desde Pujerra. “Entendemos que si un vecino no puede acceder a un cajero, una caja de ahorro o a un banco tiene dificultades para que la economía circule en la población. Ese dinero se va fuera del pueblo y los vecinos también se van con ello fuera del pueblo”, ha expuesto.
En este sentido, ha afirmado que “queremos sujetar a los vecinos y a las vecinas a sus territorios y para ello demandamos que todos los municipios de la provincia de Málaga tengan un cajero automático y un servicio de atención bancario”. “No podemos aspirar al progreso de la provincia de Málaga cuando miles de malagueños no tienen ni tan siquiera el acceso a un cajero automático. Por eso nuestra propuesta se lleva a la Diputación pero queremos ir respaldado de esos miles de malagueños que no tienen este servicio”, ha explicado.
Los socialistas han iniciado una recogida de firmas para reclamar a la Diputación que ponga en marcha acciones contra la exclusión financiera que sufren los pueblos de la provincia dentro de la estrategia contra el despoblamiento.
Según la diputada provincial, Gema Ruiz, “queremos que todos los municipios tengan acceso a estos cajeros automáticos para que puedan hacer acciones y servicios tan básicos como pagar un recibo, sacar dinero o pagar un compra en su pueblo”. “Estas acciones también fijan a las personas en el territorio y también trabajamos el consumo en los comercios de los pequeños municipios”, ha detallado.
Los socialistas advierten de que miles de personas en pequeños municipios de nuestra provincia sufren esa exclusión financiera porque no disponen de una oficina física o un cajero automático en su entorno. Según datos de 2017 del Instituto Nacional de Estadística y el Banco de España, un total de 21 municipios de la provincia de Málaga y 14.887 habitantes carecen de oficina bancaria. “Son malagueños y malagueñas que se ven obligados a salir fuera de sus núcleos de población para poder realizar acciones tan necesarias y cotidianas como sacar dinero o pagar un recibo. En muchos casos, personas mayores que dependen de terceros para desplazarse”, han detallado desde el PSOE.
Los bancos han cerrado en Málaga más de 650 sucursales desde que arrancó la crisis. Según los últimos datos del Banco de España, correspondientes a marzo de 2019, en la provincia quedan ahora 751 sucursales operativas, con lo que la cifra ha vuelto a los niveles de 1987, hace 32 años. En concreto, municipios de nuestra provincia como Alfarnatejo, Alpandeire, Árchez, Arenas, Atajate, Cartajima, Cútar, Faraján, Júzcar, Macharaviaya, Moclinejo, Montecorto, Parauta, Salares, Sayalonga, Sedella o Serrato ya no tienen oficinas bancarias.
En el año 2017 el Defensor del Pueblo Andaluz abrió una queja de oficio, dirigida a las ocho diputaciones provinciales, ante su preocupación por la situación de exclusión financiera que sufre la población que reside en municipios rurales y dispersos por el cierre de oficinas bancarias, sobre todo, por lo que afecta a las personas más mayores o personas con dificultad en el acceso y manejo de las herramientas digitales. Según el propio Defensor del Pueblo, a las diputaciones provinciales les corresponde la asistencia y cooperación jurídica, económica y técnica a los municipios de menor capacidad económica y de gestión.
Por ello, el Defensor del Pueblo solicitaba a las ocho diputaciones provinciales adoptar medidas como la celebración de conciertos con las propias entidades financieras para la atención presencial; la realización de programas específicos de alfabetización financiera digital para personas mayores en zonas rurales a través de la red Guadalinfo; la firma de convenios con los ayuntamientos para formar a personas que puedan realizar labores de monitorización y ayuda a personas que necesiten realizar gestiones financieras telemáticas, etc.
En diputaciones andaluzas como las de Almería o Granada han atendido la queja del Defensor del Pueblo y han puesto ya en marcha medidas contra la exclusión financiera.
La Diputación de Granada ha firmado un acuerdo con Caja Rural Granada para que se pongan cajeros automáticos en los municipios granadinos que carecen de estas instalaciones. El convenio cuenta con tres líneas de actuación. En primer lugar, Caja Rural de Granada junto con la Diputación Provincial impulsan y desarrollan la formación centrada en la banca electrónica de Caja Rural (Rural Vía) en los municipios de la provincia sin sucursal bancaria mediante la red Guadalinfo. El acuerdo también establece la colocación de cajeros que serán ubicados en el espacio que elija y ceda cada ayuntamiento a lo que se suma la prestación de servicios financieros mediante personal propio de la entidad que se desplazara a los municipios beneficiarios con la periodicidad que estime la entidad en base a la demanda.
La Diputación de Almería ha aprobado un gasto plurianual (2020-2027) de 7 millones de euros para atender a los gastos derivados del plan que se va a ejecutar en los municipios del interior de la provincia que sufren el problema de la exclusión financiera. Esta diputación asumirá el 100% de los gastos para la implantación de los cajeros, mientras que los municipios sólo tendrán que ceder los espacios y asumir la conexión eléctrica del dispositivo electrónico.
De esta forma, los socialistas consideran que la Diputación de Málaga debe trabajar en la misma línea que estas otras diputaciones y contribuir a acabar con la exclusión financiera en los pequeños municipios de nuestra provincia.