El hecho tenía lugar el pasado viernes, a la llegada de un vuelo proveniente de Sao-Paulo (Brasil), a la capital de España. Allí agentes de la Guardia Civil destacados en el aeropuerto madrileño detectaban la salida de dos pasajeras, una de ellas de avanzada edad que era trasladada en una silla de ruedas, y, que por su aptitud, levantaron sus sospechas.
Estas mujeres tenían un billete con destino Tenerife, cuyo vuelo partiría momentos después. En el momento en el que los agentes se disponían a realizar el oportuno control para comprobar que no portaban ningún tipo de sustancias u otros efectos ilegales, la acompañante de la anciana inició una enloquecida huída.
Momentos después, los agentes de la Guardia Civil descubrían que la anciana, de 92 años, portaba adosado en diversas partes de su cuerpo varios paquetes, los cuales arrojaron un peso de 4.300 gramos de cocaína, por lo que se procedió a su detención.
Inmediatamente se inició una búsqueda minuciosa por toda la Terminal 4 del aeropuerto, localizando poco después a la acompañante.