La Universidad de Almería (UAL) ha concedido un total de 116 ayudas para el préstamo de ordenadores portátiles y tarjetas de datos hasta final de curso para los alumnos con rentas familiares más bajas o que, por diversas circunstancias, presentan una situación socio-familiar o económica de especial dificultad.
Según han indicado a Europa Press fuentes de la Universidad, fueron un total de 118 solicitudes las que se presentaron para interesar el préstamo de 58 ordenadores portátiles de los 70 disponibles así como de 75 tarjetas SIM de las 150 conexiones con 60 gigabytes que se ofertaron para su uso hasta el 15 de julio.
Además de estas ayudas, el órgano académico ha indicado que va a evaluar tres solicitudes más que se presentaron fuera de plazo al tiempo que se va a revisar una solicitud tras una corrección de errores. De otro lado, dos de las peticiones han sido rechazadas por la situación de impago de los precios públicos por servicios administrativos y académicos de matrícula de los solicitantes.
Estas ayudas extraordinarias dirigidas a los alumnos de Grado y Máster se puso en marcha tras la decisión de mantener la docencia online hasta final de curso debido a la crisis sanitaria del covid-19. La línea de colaboración está reservada para aquellos alumnos que durante el presente curso hayan obtenido una beca general del Ministerio de Educación o, en su defecto, una ayuda social de la UAL y la Junta de Andalucía.
El plazo de solicitud de ayudas finalizó el pasado 23 de abril. La entrega de las ayudas se realizará por la Universidad de Almería a través de un procedimiento que será comunicado a los alumnos beneficiarios con antelación suficiente y en atención a las instrucciones de las autoridades sobre los desplazamientos.
Este programa de ayudas al estudio, convocado de forma conjunta por el Vicerrectorado de Estudiantes, Igualdad e Inclusión y el Vicerrectorado de Transformación Digital de la Universidad de Almería, se desarrolla en el marco de las actuaciones de gestión de la Universidad encaminadas a ofrecer los medios y recursos necesarios para garantizar la continuidad en la formación universitaria de los estudiantes bajo las condiciones extraordinarias provocadas por la situación sanitaria derivada del covid-19.
