El Ayuntamiento de Sevilla reutilizará por primera vez en los últimos años el superávit de 2019 para garantizar el mantenimiento de los servicios públicos de transporte urbano, recogida de residuos y limpieza viaria y para impulsar el plan municipal de vivienda de Emvisesa. Esta operación, que alcanza los 21 millones de euros, permitirá reforzar en el presupuesto de 2021 medidas que contribuyan a la reactivación económica y social de la ciudad. La propuesta, inicialmente acordada con el grupo político Ciudadanos, ha contado también con el voto favorable de Adelante Sevilla, y no ha obtenido ningún voto contrario.
Concretamente, el Pleno ha aprobado este martes la incorporación de superávit registrado por la Agencia Tributaria, el ICAS y el Alcázar en el año 2019. De las cantidades acumuladas por esos organismos autónomos, de acuerdo con los criterios de Hacienda y la Intervención General, se han considerado disponibles para su reutilización un total de 21 millones de euros. La normativa actual exige que este dinero se ejecute antes de la finalización del ejercicio o, en caso contrario, el Ayuntamiento debería esperar hasta la liquidación del año 2020, ya entrado 2021.
Por este motivo, el área de Hacienda ha elaborado una propuesta de reutilización del superávit para su ejecución este año dedicando estos ahorros a garantizar el funcionamiento de servicios públicos y adelantando recursos que iban a estar incorporados en el presupuesto de 2021. Así, se realizará una transferencia de 17 millones de euros a Tussam para paliar las pérdidas que se han producido este año y ejecutar inversiones necesarias; una aportación de 3,2 millones de euros a Lipasam para inversiones y una ampliación de capital de 1 millón de euros para Emvisesa dentro del nuevo plan municipal de vivienda.
Esta operación permitirá adelantar este dinero y por tanto liberar una cantidad similar de 21 millones de euros en el proyecto de presupuestos de 2021. El objetivo ahora es destinar estos nuevos recursos generados a reforzar las medidas aprobadas en la comisión de reactivación económica y social por unanimidad. Como ejes principales se priorizará la protección de la salud, las ayudas a sectores económicos afectados por la crisis, la inserción laboral, el escudo social, la sostenibilidad y lucha contra el cambio climático, la transformación digital y el patrimonio y los equipamientos públicos.
“Hemos tomado una decisión que durante muchos años ha sido imposible para los ayuntamientos españoles como es la de reutilizar ahorros para mejorar servicios públicos. Hemos recuperado parte de la autonomía que perdimos cuando una ley del Gobierno central de la legislatura de Mariano Rajoy obligó a que todos los remanentes se dedicaran a amortizar de forma anticipada deuda. Es una medida prudente y diseñada con rigor. Ahora, debemos seguir avanzando y desde el Ayuntamiento de Sevilla exigimos al Gobierno central que compense a los ayuntamientos por el déficit de ingresos en el transporte público y por todos los gastos en los que se ha incurrido en este ejercicio pese a la caída de ingresos”, explicó el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, tras la aprobación en el Pleno de los acuerdos para el uso del superávit sin ningún voto en contra.
Por su parte la delegada de Hacienda, Sonia Gaya, ha destacado que Sevilla es una de las primeras ciudades en poner en uso su superávit en este año especialmente difícil por la crisis sanitaria: “Hemos aprobado una operación diseñada con el mismo rigor, seriedad y seguridad jurídica que ha permitido llegar al Ayuntamiento en este momento, pese a las graves dificultades de 2020, con estabilidad presupuestaria y con ahorros que se puedan poner en uso. Ahora, el objetivo es que pronto consensuemos un presupuesto para 2021 que nos permita reforzar los servicios públicos, mantener la inversión y tener a Sevilla preparada para ejecutar los fondos de recuperación de la Unión Europea en cuanto estén disponibles”.
