La evolución sexual en las últimas décadas en las mujeres ha afectado a la sexualidad, pero hay hombres que aún no hablan el mismo lenguaje íntimo que su mujer, novia, amiga con derecho... o simplemente no están por la labor. En la intimidad de dos personas debe expresarse algo muy sencillo pero que hacemos muy complicado: “No hagas esto, no me gusta”, “me gusta más...” se convierte en tabú y muchas mujeres por miedo a que las tachen de ser ligeritas callan, aunque curiosamente un hombre nunca se lo plantearía. A algunos hombres estas cuestiones les afecta el ego. Es necesario que exista una comunicación fluida para disfrutar de una relación sexual más satisfactoria, que es en la que las dos partes disfrutan.
Muchos hombres han aprendido a través de la pornografía, he aquí el problema porque es ficción y es filmado desde un punto de vista principalmente masculino. A pesar de que cada vez tratan de parecer lo más real posible, se alejan de la realidad de lo que una mujer desea. El problema reside en que las mujeres guardan silencio.
Lo importante es el camino no el final, pero muchos hombres no entienden por qué su mujer no llega al clímax con la misma facilidad que él. Por ello muchas mujeres fingen el orgasmo para no preocupar a su pareja. El exceso de presión respecto a este tema dificulta que se produzca, lo mejor es relajarse, no dar tantas vueltas a la cabeza y disfrutar de lo que se tiene.
La falsa creencia que los hombres tienen sobre que las mujeres necesitan un largo tiempo de relación sexual es equívoca porque la capacidad de lubricación en la mujer es limitada. Tampoco ayuda el quedarse corto.
Muchos hombres suelen criticar la dificultad para lograr que una mujer llegue al orgasmo, pero realmente no es tan difícil, sólo hay que saber cómo hacerlo. Las mujeres lo saben pero callan por vergüenza, no reconocen si han disfrutado previamente con otros hombres o a través de la masturbación, del sexo. No es el caso de los hombres.
En lo que sí coinciden casi todas las mujeres es en lo bruscos que suelen ser los hombres, por eso rehúyen a la hora que un hombre las masturbe o practique sexo oral. Está claro que cada pareja es un mundo, cada mujer y hombre, aún así hay parejas con diálogo mutuo sobre lo que quieren y les gusta, más cuando llevan tiempo de relación convirtiéndose en uno sólo llegando incluso al clímax juntos, con una química muy especial, disfrutando plenamente de una relación placentera para ambos. Esta es la razón de que parejas que llevan varios años juntas cada vez practiquen más sexo en lugar de una vez cada seis meses si llega que es lo habitual, tristemente.
