Un paciente con una hernia gigante en la zona de la ingle, formador de defensa personal, policial y militar de Motril, ha sido operado con éxito por el doctor Carlos Ballesta y su equipo en el Hospital HLA Inmaculada de Granada mediante cirugía laparoscópica.
Según ha informado el centro médico en un comunicado, hace alrededor de un año el paciente comenzó a percibir un bulto en crecimiento a la altura de su escroto, por lo que le diagnosticaron una hernia inguinal gigante.
Esta patología se produce a raíz de la salida de parte del intestino desde el interior de la cavidad abdominal hacia el canal inguinal (ingle), de forma que el intestino herniado puede quedarse localizado en esa zona o, en los hombres, llegar hasta el escroto, la bolsa que recubre los testículos.
Este bulto o protuberancia puede ser asintomático o causar dolor y, en el caso del paciente de Motril, comenzó como una pequeña molestia cada vez más severa.
"Al principio era pequeño y solo me provocaba pequeñas punzadas, pero ha acabado siendo muy doloroso y ha incrementado mucho su tamaño", ha explicado, al tiempo que ha relatado que llegó a volverse prácticamente inmanejable y en los últimos días sentía un dolor tan intenso que hasta le causaba náuseas y ganas de vomitar.
Según el centro laparoscópico del doctor Ballesta, el paciente "peregrinó" durante meses para encontrar a un especialista que eliminase su bulto mediante laparoscopia, una cirugía mínimamente invasiva.
Finalmente, Ballesta y su equipo lo han intervenido en el Hospital HLA Inmaculada de Granada.
El cirujano ha explicado que la intervención ha consistido en la reducción del intestino a la cavidad abdominal, devolverlo a su sitio. Después hay que tapar el agujero y anclarlo por medio de unas mallas especiales preformadas.
Finalmente se debe cubrir la malla con una lámina muy fina dentro del cuerpo, el peritoneo, ha indicado el doctor, que ha añadido que el paciente recuperará su actividad física normal entre uno o dos días después de la operación.