La Junta critica que el Gobierno apruebe los planes hidrológicos en el “último minuto”

La Junta de Andalucía ha censurado este miércoles que el Gobierno haya aguardado hasta el “último minuto”, el último Consejo de Ministros previo a las elecciones, para aprobar los planes hidrológicos de las cuencas mediterráneas.

“Bien está lo que bien acaba, pero nos hubiera gustado que hubiera sido mucho antes”, ha señalado en declaraciones a los medios el consejero de Sostenibilidad y portavoz de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, durante una visita al Ayuntamiento de Huércal de Almería.

Fernández-Pacheco ha añadido que al Gobierno andaluz también le hubiese gustado “que la agenda de infraestructuras hídricas, que son competencias del Estado, hubieran sido una prioridad desde el primer momento para Pedro Sánchez y sus ministros”, pero ha lamentado que "no ha sido así".

“Ha tenido que llegar esta terrible sequía con sus graves consecuencias económicas, que tener lugar unas elecciones municipales en Andalucía en las que, de manera mayoritaria, los andaluces se han dicho alto y claro que no respaldan ese modelo de gestión (…) para que empiecen a hablar de agua”, ha sostenido.

En este sentido, ha contrapuesto la labor de la Junta, que “desde el primer momento” ha abordado este asunto, de forma que las “infraestructuras hidráulicas lideran la inversión pública en Andalucía”.

“Eso no había sucedido nunca antes. Tenemos tres decretos de sequía, un plan de medidas frente a esta situación que va a movilizar hasta 4.500 millones a lo largo de los próximos años y Juanma Moreno va a seguir luchando por las infraestructuras hídricas, pase lo que pase”, ha incidido.

De esta forma, Fernández-Pacheco ha mantenido que no existe un “tema más importante” para el futuro de Andalucía que el agua, por lo que la Junta va a pedir que se reconozca la “singularidad hídrica” de la región “más seca de Europa” a nivel estatal y a nivel europeo, “independientemente de quién gane las elecciones el próximo domingo”.

Se ha referido a la ola de calor y al cambio climático que “tienen en la sequía la peor de sus consecuencias y ha dejado claro que "el agua no solo sirve para beber sino también para que trabajen y para que produzcan la gran mayoría de los sectores económicos de esta tierra”, por lo que ha insistido en que "frente a la falta de lluvia la única manera realista y responsable de actuar es invirtiendo en infraestructuras”.