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La Junta evalúa la viabilidad ambiental de un estudio que prevé reabrir las minas de Serón y Bacares

La empresa solicitó el permiso de investigación denominado \'El Candil\' en mayo del pasado año ante la Dirección General de Industria, Energía y Minas de la Junta

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La Junta de Andalucía, a través de la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, ha sometido a información pública el estudio impulsado por la empresa Alfarajo S.L. por el que prevé evaluar más de 6.700 hectáreas de terreno en los términos municipales de Serón y Bacares bajo la posibilidad de extraer minerales metálicos durante los próximos años.

   La empresa solicitó el permiso de investigación denominado 'El Candil' en mayo del pasado año ante la Dirección General de Industria, Energía y Minas de la Junta, si bien no ha sido hasta hace pocas semanas cuando se ha efectuado la evaluación ambiental, que se encuentra en fase de exposición pública hasta el próximo 5 de diciembre.

   El proyecto, consultado por Europa Press, prevé el estudio de 226 cuadrículas mineras para investigar la presencia de minerales metálicos tales como hierro o plomo en zonas de Bacares y Serón en los que a principios del pasado siglo ya se registró actividad minera.

   Estos sondeos son necesarios para completar los estudios previos y trabajos encaminados a comprobar el estado de los yacimientos y de los recursos metálicos que aún puedan ser explotables en esta área de la Sierra de los Filabres, así como a analizar su viabilidad económica a corto y medio plazo.

   La empresa, que ha presupuestado en 138.000 euros los trabajos de sondeo, espera contar con los parabienes ambientales para que así, el expediente que se tramita desde la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo pueda seguir adelante.

   Los sondeos de investigación propuestos quedan cerca de las barriada de Las Menas, a menos de un kilómetro, a unos 3,8 kilómetros de Bacares y a unos 5,6 kilómetros de Serón.

   La superficie va a ser estudiada durante el primer año mediante una campaña de cartografía en base a fotos aéreas realizadas a distinta escala que se captarán mediante los vuelos comerciales disponibles, y en segundo lugar, utilizando técnicas de teledetección mediante tratamiento geoestadístico de imágenes de satélites.

   Asimismo, durante el segundo y tercer año, se llevará a cabo con una prospección de campo consistente en un levantamiento de perfiles a realizar en las labores mineras existentes y en un muestreo selectivo mediante la perforación de seis sondeos de investigación.

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