El joven que se enfrenta a prisión permanente revisable por presuntamente degollar a su excompañera sentimental en Huércal de Almería (Almería), ha afirmado hoy que no recuerda nada de lo ocurrido pero, al ser interpelado sobre si cree que pudo matarla, ha dicho: "A lo mejor sí, posiblemente".
Así lo ha manifestado a preguntas del fiscal, las acusaciones particulares y su defensa durante la primera sesión de la vista con jurado popular contra él, en la que ha asegurado que horas antes del crimen, que tuvo lugar entre las siete y las ocho de la mañana del 15 de enero de 2017, salió a beber a un pub en la pedanía de Campohermoso, en Níjar (Almería).
Afirma que allí estuvo unas tres horas, dos de ellas en compañía de un conocido y jugando a los dardos, así como que durante este tiempo bebió al menos "13 o 14 cervezas 'Alhambra' y 8 o 9 cubatas de vodka" y lo siguiente que recuerda es encontrarse ya detenido por la Guardia Civil, cuyos agentes le dijeron que "había matado a mi pareja o exnovia".
Ha negado que a finales de diciembre se produjese una ruptura total entre ellos, de forma que, según él, seguían siendo "amigos" y manteniendo relaciones íntimas, que dormía varios días a la semana en la casa de ella en Huércal de Almería y que a veces se quedaba solo en el domicilio, pero que nunca tuvo las llaves de este dúplex.
Algo que el abogado de la acusación, Esteban Hernández Thiel, ha contrapuesto con una declaración previa durante la fase de instrucción, en la que el procesado F.S.G.S. afirmó que Antonia G.A., la víctima, que tenía 33 años cuando murió, le había dado una copia y que tenía en su móvil un vídeo de ese momento.
Ha reconocido que se presentó a ella y a la familia de ésta como 'Antonio' y que tenía un Facebook falso con este nombre y una foto de cuando tenía "más pelo" porque le daba vergüenza ser calvo, insistiendo en que ella supo su verdadero nombre un tiempo después.
A pesar de las insistentes preguntas del fiscal y Hernández Thiel, en todo momento ha dicho no recordar que una mujer extranjera solicitase una ambulancia tras encontrarlo con un "coma etílico", haber llegado al Hospital Torrecárdenas de Almería, pedir el alta voluntaria, tomar un café de camino a la casa de Antonia, llegar a ésta, haberla violado o acabar con su vida.
Mantiene que tampoco recuerda cómo se produjo la muerte, haberla mutilado, limpiado su cadáver, o enterrado el móvil de ella y sus bragas, además del cuchillo con el que la degolló, en un descampado cercano, o haber manifestado a la Guardia Civil cuando fue detenido que alguien había "atacado" a su pareja.