Fines de semana, puentes, vacaciones, son las fechas escogidas por el turista rural andaluz para escaparse y buscar tranquilidad o la naturaleza, aunque a este sector turístico también le ha afectado la crisis ya que han reducido su gasto en 2009 un 18% con respecto al año anterior, aunque reconocen que viajan más. La reducción del gasto no sólo se ha dado en el turista rural, también la población general reconoce que ha modificado sus vacaciones por la crisis.
Estas son algunas de las conclusiones del informe “Radiografía del Viajero Rural”, que desde hace tres años realiza el portal web Toprural.com, que aglutina más del 70% del total de alojamientos existentes en España. De las encuestan realizadas para conocer los hábitos y tendencias de los viajeros rurales (520 de las 2.500 fueron realizadas a andaluces), el informe destaca que los viajeros rurales andaluces han viajado más en 2009, pero han reducido el gasto con respecto a 2008.
El descenso del gasto no sólo se circunscribe al turismo rural: el 72% de los andaluces admite haber modificado sus vacaciones por la crisis, 17 puntos más que en 2008 (55%), y de ellos, el el 49% ha buscado un alojamiento más económico o reducido el gasto en actividades complementarias (transporte, restauración, etc.) y un 30% ha viajado menos días.
En cuanto a los viajeros rurales andaluces, un 22% declara haber viajado menos en 2009. Sin embargo, el 28% afirma haber viajado más en 2009 que en años anteriores y un 50% declara que ha viajado igual que en otras ocasiones. De hecho, en 2009 crecen tanto la frecuencia media de viajes (4,1 veces, frente a 3,0 en 2008) como la duración media de la estancia (4,3 días, frente a 3,9 días en 2008).
Los datos del informe muestran una clara disminución del gasto en los viajeros rurales andaluces. En 2009, han gastado 141,6 euros por persona y fin de semana, 26,8 euros menos que en 2008 (168,4 euros). En cuanto al presupuesto destinado al alojamiento, éste también se ha reducido, pero en menor medida que el presupuesto total (pasa de 81,9 euros en 2008 a 74,7 euros en 2009). Esto indica una mayor disminución del gasto destinado a actividades complementarias (restauración, transporte, excursiones, etc.), que pasa de 86,5 euros en 2008 a 66,9 en 2009. Esta partida ha supuesto un 47% del total del presupuesto (un 51% en 2008).
Además, el precio sigue siendo un factor clave a la hora de contratar un alojamiento rural (un 57% de los viajeros andaluces lo considera muy importante), superado sólo por la limpieza (65%) como aspecto más relevante. Frente a esto, destaca que el 56% de los viajeros rurales andaluces considera el turismo rural barato, frente a un 44% que lo considera caro.
Perfil del turista rural
En cuanto al perfil del viajero rural andaluz, el 51% son mujeres frente al 49% de hombres, con edades comprendidas entre los 25 y los 44 años (71%) con estudios medios y superiores (95%) y en su mayoría urbanitas. Buscan en el turismo rural tranquilidad y contacto con la naturaleza.
El turismo rural, tal y como afirman los viajeros andaluces, se comparte sobre todo en pareja (50%) y con amigos (50%), seguido de pareja e hijos (32%) y otros familiares (18%).
Además, la mayoría (77%) opta por alojarse en casas rurales de alquiler íntegro, seguidas de hoteles rurales (38%) y casas rurales de alquiler por habitaciones (27%).
Según los datos del informe, los viajeros siguen optando por los fines de semana para sus escapadas rurales (72% frente al 75% en 2008), seguido de puentes (57% frente a 60%), vacaciones de verano (34% frente a 31%), Semana Santa (26% frente a 19%), y Navidades (19% frente a 13%). Además, el 94% de los no viajeros rurales andaluces se plantea practicar este tipo de turismo en el futuro.
Búsqueda de alojamiento
En cuanto al método de búsqueda del alojamiento rural, Internet es el medio más utilizado por la mayoría (90% en 2009 y 2008). Le siguen las recomendaciones de amigos y familiares (47% frente a 48%) y las guías de turismo rural, que acusan un descenso de 7 puntos (32% frente a 39%).
Por otra parte, los factores que más influyen en la elección final del alojamiento son, en primer lugar, las características y servicios de los que éste disponga (62%), las fotos (62%), la página web del alojamiento (50%) y las opiniones de otros viajeros publicadas en Internet (50%). Las recomendaciones de amigos y familiares quedan relegadas al quinto puesto (47%).
Si bien Internet es el medio más utilizado para la búsqueda del alojamiento, no lo es para la reserva. La mayoría de los viajeros rurales andaluces siguen realizando sus reservas por teléfono directamente con el propietario (76%), incluso en mayor medida que en 2008 (59%). El 46% realiza sus reservas a través del correo electrónico y un 41% opta por las reservas on-line. Asimismo, cabe señalar que aumenta la antelación con la que los viajeros andaluces realizan su reserva (28 días en 2009 frente a 23 en 2008).
La alternativa al sol y la playa que ya se ha convertido en realidad
El turismo rural y de naturaleza ha dejado de ser una alternativa en Andalucía para convertirse en una realidad, puesto que en 2008 la región recibió a 4,4 millones de turistas que buscaban este segmento turístico, lo que representa el 20% del total. Además, el turismo de interior se considera como uno de los “segmentos más solventes y con mayor potencialidad de crecimiento dentro de la evolución turística nacional e internacional” y, aunque se resiente de la crisis, la ha soportado mejor que el de sol y playa, tradicionalmente el más fuerte y consolidado de la región.
Así, el turismo de interior se configura como un producto clave para desestacionalizar la oferta, al atraer viajeros durante todos los meses del año con una alta rentabilidad al captar un tipo de turismo que gasta un 10% más al día que la media y con un alto grado de fidelidad (el 67% repite su visita a Andalucía).
Además, este turismo se complementa con el segmento cultural, uno de los de mayor potencial de desarrollo en Andalucía, ya que, según datos de la Consejería de Turismo, es uno de los que mejores cifras de crecimiento está registrando. Según la Junta, el turismo cultural es la segunda motivación principal de los turistas que visitan Andalucía tras el sol y playa al generar en 2008 un total de 6,8 millones de visitas (el 27% del total), lo que supuso un crecimiento superior al 4,5% respecto al año anterior. A esto se añade que atrae un tipo de viajero con un gasto diario superior a la media en casi 5 euros y, preferentemente, al nacional, con un alto nivel de fidelización respecto al alojamiento hotelero y a la restauración.