En el marco del Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias y en relación al Soporte Vital Básico, en 2009 se han impartido 41 sesiones formativas con manejo de desfibrilador semiautomático a 810 profesionales, y otras cinco con desfibrilador automático a 120 alumnos. En total, han participado 930 profesionales sanitarios y no sanitarios. Con respecto al Soporte Vital Avanzado se han realizado cuatro ediciones dirigidas a profesionales sanitarios del Distrito Bahía de Cádiz- La Janda, lo que suma 112 alumnos más.
objetivos
Estas actividades de formación han sido impartidas por docentes cualificados, monitores e instructores de Soporte Vital que desarrollan su labor en los Dispositivos de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU) del distrito, cuya Unidad de Formación y Docencia se encarga de la organización.
Con esta formación se garantiza una asistencia de calidad en los centros de salud y una correcta utilización de aquellos medios que los profesionales sanitarios deben manejar, tanto en los dispositivos móviles como en los servicios de urgencias atención primaria. Durante los fines de semana cerca de 100 profesionales sanitarios, entre médicos y enfermeros de familia, celadores y técnicos de transporte sanitario, trabajan en los 13 servicios de urgencias y en las nueve unidades móviles de cuidados críticos de las que dispone el Distrito Sanitario de la Bahía de Cádiz y La Janda.
urgencias y emergencias
El Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias, destinado a dar una respuesta integral y continua a las urgencias y emergencias sanitarias originadas en el ámbito de la comunidad autónoma, incluye, entre otros muchos aspectos, la formación constante del personal sanitario en soporte vital favoreciendo un perfil de profesional en este tipo de situaciones críticas para el paciente. En ese sentido, los cursos programados en el Área Sanitaria incluyen aspectos como la secuencia de actuación en el soporte vital básico en adultos o la resucitación cardiopulmonar básica en los niños y lactantes.
Según los datos del plan, los minutos posteriores a una parada cardiorrespiratoria son cruciales para el paciente, ya que en este tiempo la falta de oxígeno y sangre en el cerebro pueden causar daños irreversibles e incluso la muerte. Por este motivo, es fundamental que la persona que tiene el contacto inicial con el afectado actúe de forma inmediata.
