Estrategia
Según él, “la estrategia del Racing es hacer ver que el que tiene que pagar las deudas es Manuel Lores, ex presidente racinguista y no el club”. Otero fue más allá admitiendo que “no se puede ir a mentir a los sitios”. Para a continuación decir que “la administradora no puede decir que la documentación presentada es falsificada cuando se han presentado la sentencia favorable del despido improcedente. Hay una demanda ganada, un certificado de empresa, un contrato del INEM y un informe de magistratura donde se reconoce que el club me debe pagar”, se quejaba Otero.
La perplejidad le llegó cuando escuchó de boca de Yolanda Morales, administradora concursal, “que yo no había trabajado en el Portuense. Ese es el argumento que están utilizando con todo el mundo y eso no lo puede decir ella. Debe impartir justicia y estar al lado de la verdad y no estar ni de parte del club ni de los trabajadores”. Para el caso de que la sentencia sea favorable a los intereses de Javier Otero, ésta pasaría a engrosar la lista de acreedores ya existente aunque ‘subordinada’ es decir, a la espera de que cobren todos y cada uno de los demandados y toda vez que el club obtenga beneficios.