Según contó Brizuela, la primera parte de la jornada correspondería al inicio de la Semana Santa, mientras que la tarde y la noche del Miércoles de Ceniza estarían relacionadas con los últimos días de la Semana Santa.
El miércoles prácticamente se escapó sin llover, pero eso sí, el día no se salvó de una espesa nubosidad que aminoró conforme fue avanzando la jornada. A pesar de que no hubo precipitaciones abundantes y de que hubo una mejoría con respecto a días anteriores, González Brizuela se muestra pesimista con el pronóstico para la Semana Santa.
A expensas de que llegue un viento de levante que se lleve la borrasca para otro lado, el cabañuelista vaticina un Domingo de Ramos lluvioso, con una probabilidad de precipitaciones bastante alta que se mantendrá durante la mañana del Lunes Santo y que irá desapareciendo conforme la noche se vaya acercando a la madrugada del Martes Santo. Para el resto de la semana González Brizuela prevé una alta nubosidad que podría dar lugar a chubascos débiles y dispersos.
La media de días de lluvia en el mes de abril es de 6, uno menos que en el mes de marzo. No obstante, la primavera puede jugar malas pasadas a los cofrades.