El empresario hostelero Patrocinio Mora, que la pasada Nochevieja invitó a cenar en su restaurante a noventa inmigrantes que viven en campamentos en Lepe (Huelva), ha dicho a Efe que después de su acción solidaria "siempre me queda un sabor agridulce". 


Mora ha admitido que no es posible solucionar la situación de estas personas con dos cenas al año, ya que también los invitó en Nochebuena, "pero por lo menos tratamos de paliar en parte su situación". 


Para la cena de anoche, Patrocinio Mora contó con una veintena de "camareros voluntarios", entre políticos, amigos y voluntarios, a los que ha agradecido su labor: "es gente que se ha concienciado y se ha dado cuenta de que era mucho trabajo para mi mujer y yo solos, y afortunadamente se prestaron de forma voluntaria". 


Ha indicado también que ha llegado a un acuerdo con una cadena de tiendas de ropa para conseguir chandals y zapatillas deportivas para las personas a las que ayer invitó a cenar, "para las que quiero tener el próximo día 6 un regalo de Reyes", ha concluido.