La Universidad de Sevilla ha aprobado este miércoles su nuevo estatuto, en una votación celebrada en el seno de su claustro, por 204 votos a favor, 17 en contra, 2 votos en blanco y uno nulo, por lo que queda aprobado con el apoyo del 91% de los votos y superar ampliamente el mínimo de votos necesarios, fijado en 127 al estar actualmente compuesto el claustro por 251 miembros. Han votado un total de 224 claustrales, lo que sitúa el porcentaje de participación en el 89,2 por ciento, según informa la institución académica.
Una vez finalizado el escrutinio, el rector de la US, Miguel Ángel Castro, ha tenido palabras de agradecimiento para los miembros del colectivo del Personal Técnico, de Gestión y de Administración y Servicios (PTGAS) que han trabajado de forma intensa durante todo el proceso, a los miembros de la Mesa del Claustro y especialmente a los integrantes de la Comisión de Proyectos Normativos, "quienes han trabajado siempre para alcanzar el consenso".
Asimismo, Castro ha agradecido las aportaciones realizadas por la comunidad universitaria a través de sugerencias, alegaciones o enmiendas, lo que ha permitido "tener el mejor texto de estatuto", tras ser incorporadas las 16 enmiendas validadas durante el proceso previo.
Durante la primera sesión del claustro inicial de la última fase del procedimiento de configuración del nuevo estatuto, José Luis Sevillano, miembro de la Comisión de Proyectos Normativos, encargada de la confección de propuesta de nuevo estatuto, pormenorizaba los aspectos del proyecto con una lectura de sus principales contenidos, entre los que destacan la incorporación del voto ponderado para la elección del rector/a.
Entre los múltiples detalles comentados por José Luis Sevillano, destacaba que el nuevo claustro de la Hispalense fruto de esta propuesta de nuevo estatuto contará con 300 miembros. Más en profundidad, estará compuesto por 153 miembros del personal docente e investigador (PDI) de carácter permanente, 24 miembros del personal docente investigador no permanente o personal investigador no permanente, 90 estudiantes entre los que estaría el delegado del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus) y 33 miembros por parte del personal técnico, de gestión y de administración y servicios.
También ponía especial énfasis en los requisitos a "exigir" en las candidaturas al puesto de rector/a, explicando que la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) estipula en materia de requisitos "tres escenas de investigación", que son "tres quinquenas de docencia y cuatro años de experiencia de gestión universitaria en algún órgano o cargo unipersonal".
En ese marco, según Sevillano, a la hora de redactar la propuesta de nuevo estatuto se ha "intentado reflejar este requisito que establece la LOSU como transitorio", bajo la premisa de que "imponer unos requisitos menores no correspondía y tampoco sería necesario establecer requisitos mayores".
Este requisito, recordémoslo, ha contado con la oposición del aspirante a candidato al puesto de rector Manuel Marchena, ex gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla en el mandato del socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, entre otros altos cargos municipales; toda vez que el actual rector, Miguel Ángel Castro, no se postulará para revalidar el puesto.
Tras la ponencia de detalle del texto original del nuevo estatuto, el claustral Luis Ángel Hierro avisaba de que el informe de José Luis Sevillano incurría en "un hueco" al no profundizar en las enmiendas "rechazadas" por no tener ningún voto favorable en el seno de la Comisión, especificando que él había formulado 22 enmiendas y 13 habían sido excluidas, pese a ser "de trascendencia".
Entre ellas, citaba sus enmiendas sobre las funciones del Consejo Social, la regulación de la adscripción de centros, la necesaria "regulación del sistema de transparencia", que no figura según sus palabras en la nueva propuesta pese a que "lo exige la Ley"; o aspectos de "incompatibilidad de claustrales".
Tanto él como el también claustral Juan Vázquez manifestaban que tras la lectura de José Luis Sevillano debía haber procedido un turno como tal de intervenciones de los claustrales sobre el contenido de la propuesta, antes de comenzar con las enmiendas, avisando además de que no se conocía aún aspectos como "el número de vicerrectores" del nuevo estatuto.
Jorge Luis Blanco, de su lado, mencionaba otras enmiendas no admitidas para debate pero de "interés", como una relativa a la necesidad de haber introducido un sistema electrónico de votación o sobre la asistencia a las juntas de centros por parte de los claustrales, por citar a algunos de los claustrales que intervinieron.
Tras el correspondiente debate sobre las enmiendas elevadas al claustro, pesaron los acuerdos alcanzados entre la Comisión de Proyectos Normativos, encargada de la redacción del texto, y la Mesa del claustro, para reducir el número de enmiendas de 61 a 32, de las cuales sólo 16 fueron validadas al obtener cada una de ellas un mínimo de 127 votos, ya que actualmente el claustro lo componen 252 miembros.
La participación en dicha votación fue del 87,6 por ciento al haber votado 221 claustrales de los 258 convocados a las urnas, según la hispalense.
Fruto de este procedimiento, en el porcentaje de representación de los distintos sectores en el voto ponderado de la elección a rector/a, el personal docente e investigador permanente tendrá finalmente un 53 por ciento de representación; el personal de dicha naturaleza pero no permanente un siete por ciento, el estudiantado un 30 por ciento y el personal técnico, de gestión y de administración y servicios un diez por ciento.
Además, las enmiendas validadas y finalmente incorporadas al texto eran las cuatro transaccionales a artículos relativos a la elección del rector y duración de su mandato; elección de decanos y/o directores de centro; composición del Consejo de Departamento; e impulso a la Ciencia Abierta, a la Ciencia Ciudadana y a la divulgación científica.
Otras de las enmiendas incorporadas al texto del proyecto del estatuto de la US versan sobre la composición del claustro; competencias del Consejo de Gobierno; actividades docentes; investigación; educación artística; y formación del personal docente e investigador, entre otros aspectos.
Este nuevo proyecto Estatuto será remitido a la Junta de Andalucía y tras el preceptivo control de legalidad será publicado en el BOJA. Una vez que entre en vigor el nuevo Estatuto, la Universidad de Sevilla será la primera universidad pública andaluza en contar con un nuevo texto tras la aprobación de la LOSU. Y en el territorio nacional, solo hay seis universidades que actualmente han modificado sus estatutos.