La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal que había introducido en España unos 350 kilos de cocaína ocultos entre contenedores de frutas, procedentes de Sudamérica y con destino al puerto de Sevilla.

En concreto, el cargamento, que eran bolsas de yuca trituradas y congeladas, procedía de Costa Rica y escondía en su interior cocaína en polvo, según ha informado este viernes la Guardia Civil en un comunicado.

En total hay ocho detenidos en la provincia de Barcelona y Sevilla, quienes han ingresado en prisión provisional por estos hechos.

La investigación, que comenzó gracias a informaciones de la Unidad Central Operativa (UCO), concluyó que la organización tenía una estructura empresarial de apariencia legal para ocultar la droga, que luego transportaba hasta Barcelona, desde donde realizaba su posterior distribución.

El material incautado entró en Europa por el puerto de Vigo, para luego transitar hasta Setúbal (Portugal) y, una vez allí, fue transportado hasta Sevilla por vía terrestre.

La investigación, denominada “Calypso-Guanacaste”, ha estado dirigida por la Audiencia Nacional y la Fiscalía Especial Antidroga, y contó con la participación de la Policía Judiciaria Portuguesa.