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Sevilla

Alerta en el CEIP Híspalis por el regreso del profesor acusado por conducta inapropiada

Las familias temen por la seguridad de sus hijos tras conocer la reincorporación del docente investigado por comportamientos inapropiados y denuncias previas

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  • Carteles de la concentración contra el profesor -

El regreso de un docente señalado por múltiples denuncias al CEIP Híspalis, en Sevilla Este, ha desatado la indignación y el temor entre padres y madres de alumnos. Este profesor, según las familias, protagonizó durante el curso pasado una serie de comportamientos alarmantes e inaceptables hacia menores, como incitar a bailes provocativos en clase, ridiculizar a niños, comer su desayuno o incluso obligarles a introducir hojas de cuadernos en la boca. Además, se registraron hurtos y daños a materiales e instalaciones del centro, creando un clima de tensión e inseguridad que afectó gravemente la convivencia escolar.

Desde enero de 2024, los padres comenzaron a denunciar estos hechos a través de numerosos escritos dirigidos a la dirección del colegio y a la Delegación de Educación. También buscaron apoyo en instituciones como el Defensor del Menor y la Inspección Educativa, sin que las acciones emprendidas por la administración resultaran efectivas. A raíz de la presión social y las denuncias, el docente fue apartado temporalmente del centro, lo que permitió recuperar cierta normalidad al inicio del presente curso.

Sin embargo, el pasado 22 de diciembre, al finalizar el trimestre, las familias recibieron la noticia de que este profesor se reincorporará el 8 de enero, lo que ha reactivado la preocupación y el miedo en la comunidad educativa. “Nos sentimos completamente desamparados. Tememos represalias hacia nuestros hijos y los docentes que se atrevieron a denunciar”, señalan los padres en un comunicado. Tal es el miedo de estos padres, que hay una concentración programada para el día de mañana en las puertas del colegio. 

Además, las familias descubrieron que el docente ya había generado conflictos similares en su centro anterior, de donde fue trasladado con un expediente abierto. A pesar de ello, no se tomaron medidas contundentes para impedir que volviera a estar en contacto con menores. “La administración nos aseguró que actuaría, pero ahora vemos que todo ha quedado en promesas vacías”, lamenta uno de los padres afectados.

El Delegado Territorial de Educación, Miguel Ángel Aráuz, había declarado en redes sociales que se estaba trabajando para resolver la situación, pero su reincorporación ha generado una profunda desconfianza en las autoridades educativas. Varios docentes han solicitado su traslado, y la propia directora del centro dimitió al finalizar el pasado curso.

El CEIP Híspalis, que hasta hace poco era un referente de convivencia y seguridad, se encuentra ahora en una situación crítica. Las familias exigen que se tome una decisión definitiva que garantice la protección de los menores y se eviten posibles represalias. “No podemos permitir que nuestros hijos vuelvan al aula con miedo. Necesitamos una solución ya”, concluyen.

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