El conflicto en el CEIP Híspalis, en Sevilla Este iniciado tras la publicación de un comunicado del AMPA que acusaba a un profesor del centro de hurtos y conductas inapropiadas con los alumnos. Según el escrito, estas supuestas irregularidades comenzaron a detectarse desde la incorporación del docente en enero de 2024. El AMPA denunciaba hechos como la desaparición de objetos personales, daños en instalaciones, y comportamientos cuestionables con menores, incluyendo la presunta incitación a conductas inapropiadas.

Ante esta situación, la abogada del profesor ha emitido un comunicado en el que desmiente de manera rotunda todas las acusaciones y aporta pruebas que, según ella, desmontan por completo los señalamientos hacia su cliente. La letrada explicó que las denuncias derivaron en una investigación penal que concluyó con un auto de sobreseimiento, al considerar que los hechos no eran constitutivos de delito alguno.

La abogada explicó que las denuncias surgieron en un contexto de rumores tras el traslado de su cliente al centro, donde se conoció una sanción previa que fue anulada por sentencia judicial firme. En su anterior colegio, el docente había desempeñado el cargo de director y recibido numerosos elogios de padres y compañeros por su profesionalidad.

Respecto a los presuntos hurtos, detalló que muchos de los objetos supuestamente robados aparecieron días después en el mismo centro. En el caso del robo de dinero en el bolso de una profesora, se demostró que el docente se encontraba en otro lugar del colegio en el momento del incidente. Asimismo, se desmintió que el daño a un vehículo de una docente fuera causado por su cliente, ya que se acreditó que ese día estaba en un gimnasio. Ambas acusaciones derivaron en una sentencia absolutoria en el caso del vehículo y en la inexistencia de pruebas para continuar con el resto de las denuncias.

En cuanto a las acusaciones de conductas inapropiadas con los alumnos, la abogada subrayó que no existen pruebas que las respalden y que estas se basan en meras elucubraciones. "Mi cliente ha sido un profesor dedicado, que hasta mayo de 2024 había recibido elogios por su labor docente, incluso en este centro. Las denuncias se originaron como consecuencia de un clima de desconfianza generado por rumores infundados", añadió.

La situación ha tenido un impacto negativo en la salud emocional y profesional del docente, quien ha sufrido ataques de ansiedad y ahora evalúa emprender acciones legales contra los responsables de dicha información falsa.

El caso será revisado en un procedimiento administrativo sancionador, donde se espera que la resolución definitiva aclare la situación y ponga fin a lo que la defensa considera una campaña de desprestigio sin fundamento.