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Sevilla

Diputación incorpora un retrato de Monteseirín por su papel como municipalista

Javier Fernández, Chaves, Espadas, Muñoz, Miguel Ángel del Pino y Luis Navarrete le arropan en un acto con el que se "hace justicia"

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  • Fernández habla en presencia de Monteseirín. -

La Casa de la Provincia de Diputación de Sevilla ha sido este domingo el escenario de la presentación de un cuadro retrato del expresidente Alfredo Sánchez Monteseirín, quien dirigió la institución provincial entre 1995 y 1999 bajo las siglas del PSOE; como "humanista al servicio de la política, una de las figuras municipalistas más importantes de Andalucía" y promotor de "la Sevilla moderna y competitiva".

El acto de presentación del retrato, obra de la pintora Cristina Megía (Valdepeñas, 1977), una de las artistas figurativas más destacadas en las artes plásticas contemporáneas; ha contado con la participación del actual presidente de la Diputación, Javier Fernández, y de Miguel Ángel Del Pino Menchén, quien ocupara dicho cargo entre 1983 y 1995, es decir el antecesor de Sánchez Monteseirín al frente de la entidad.

También han asistido el también expresidente provincial Luis Navarrete, el expresidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves, los ex alcaldes de Sevilla Juan Espadas y Antonio Muñoz y el vicepresidente del Congreso de los Diputados, Alfonso Rodríguez de Celis.

Un momento del acto.

Sánchez Monteseirín desembarcó en la Diputación de Sevilla en 1983 como diputado provincial, promoviendo desde su experiencia profesional sanitaria la creación del entonces área provincial de Sanidad y, posteriormente, de Asuntos Sociales, con un impulso significativo a la prestación de servicios de tal naturaleza en los municipios sevillanos.

LA DIPUTACIÓN EN LOS 80 Y 90

En sus años al frente de este departamento de la Diputación, la entidad provincial consumó hitos como la transferencia del Hospital de San Lázaro a la Junta de Andalucía, el cierre de la Casa Cuna y la creación de comunidades infantiles para la atención de la infancia en los pueblos; el cierre del antiguo centro Psiquiátrico de Miraflores con la plena profesionalización de la atención a la salud mental y el desarrollo en toda regla de los servicios sociales comunitarios en los municipios.

De su etapa como presidente de la entidad entre 1995 y 1999 destacan aspectos como la dinamización del Patio de la Diputación con actividades y contenidos de diversa índole, como gesto de apertura de la institución provincial al conjunto de la ciudadanía; promoviendo en su último año al frente de la entidad el programa "99 ideas para el 99", que incorporaba una visión moderna de la movilidad y las políticas de habitabilidad de los cascos urbanos.

PERIODO COMO ALCALDE

Aquella propuesta fue la antesala de sus políticas como alcalde de Sevilla entre 1999 y 2011, periodo en el que desde el Ayuntamiento hispalense impulsó actuaciones determinantes como la peatonalización de la Plaza Nueva y las avenidas de la Constitución y San Fernando, la instalación del tranvía, la creación de la red de carriles bici de la ciudad, la construcción del entonces rupturista complejo urbanístico de las Setas de la Encarnación o la reforma de la Alameda de Hércules con la peatonalización de la mayor parte del bulevar, entre otros proyectos.

Precisamente por eso, Miguel Ángel del Pino le ha descrito como "un humanista al servicio de la política", con lo que este retrato ahora incorporado a la galería de presidentes de la institución provincial supone un "acto de reconocimiento y justicia", según ha destacado.

EL PAPEL DEL MUNICIPALISMO

Javier Fernández, de su lado, le ha definido como "un gran político, gran persona, gran compañero, gran presidente de la Diputación de Sevilla y un maravilloso alcalde" de la ciudad hispalense; destacando que se trata de "un homenaje a la persona" de Sánchez Monteseirín y al municipalismo en sí, por la trayectoria de dicho dirigente como concejal en La Rinconada, donde fue además pregonero del Carnaval y rey mago; diputado provincial, presidente de la Diputación y alcalde hispalense durante nada menos que doce años.

Javier Fernández ha defendido que Sánchez Monteseirín fue un político "visionario" en cuanto a las políticas del momento, considerando que "la Sevilla moderna y competitiva no se podría entender sin su legado", que le convierte en "una de las figuras municipalistas más importantes de toda Andalucía". Su periodo como alcalde, según ha destacado, "corona" su recorrido político, construyendo una ciudad moderna y "de las personas contra casi todos y casi todo", en alusión a las voces contrarios que afrontó durante su etapa.

"Hacemos justicia", ha dicho Javier Fernández, señalando que el retrato de Sánchez Monteseirín en la galería de presidentes de la Diputación proyecta "el lugar que le corresponde en la historia" de Sevilla.

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