La propuesta del alcalde de Sevilla, José Luis Sanz (PP), de recuperar el formato tradicional de la Feria de Abril, de martes a domingo, ha desatado una polémica política y social. El Grupo Municipal Socialista ha criticado duramente la iniciativa, advirtiendo que supondrá una subida de tasas encubierta y acusando al equipo de gobierno de falta de transparencia en el proceso.

El concejal socialista Juan Carlos Cabrera, exresponsable de Fiestas Mayores, ha señalado que el cambio de formato afecta no solo a las fechas, sino también a las tasas que deberán pagar los abonados de casetas, carruajes y atracciones. Según Cabrera, los pagos ya realizados por el formato largo no se ajustan a la nueva duración oficial de la Feria, lo que equivale a una subida indirecta de precios. “Se está cobrando lo mismo que en 2024 por un evento más corto”, afirmó.

El PSOE también ha advertido que este cambio traerá de vuelta la “preferia”, es decir, la apertura de casetas y actividades desde el viernes anterior al inicio oficial de la Feria, algo que consideran un error. Cabrera acusó al alcalde de improvisación y de “gestionar a golpe de ocurrencias”, sin tener en cuenta el impacto económico en los feriantes y en los sevillanos.

Además, los socialistas han cuestionado la legalidad del procedimiento. Según Cabrera, la consulta ciudadana realizada en 2024 para decidir entre el formato actual y el tradicional careció de los criterios técnicos y administrativos exigidos por la Ley de Participación Ciudadana. “El proceso ha estado plagado de irregularidades, y ahora quieren aprobar por la vía rápida un cambio que no cuenta con el consenso necesario”, añadió.

La réplica del Ayuntamiento de Sevilla

En respuesta, el Ayuntamiento de Sevilla ha defendido la propuesta de volver al formato tradicional, argumentando que esta medida responde al resultado de la consulta ciudadana realizada en abril de 2024, en la que un 52% de los participantes se mostró a favor del modelo de martes a domingo. Según el Consistorio, esta decisión garantiza la coherencia con la Ordenanza Municipal de la Feria de Abril, que sigue articulada en torno a ese formato.

El delegado de Fiestas Mayores, Manuel Alés, ha negado rotundamente que exista una subida de tasas. “Las tasas de la Feria no dependen del formato, sino de la Ordenanza Fiscal vigente, que no se ha modificado desde 2017, cuando el PSOE cambió el modelo sin actualizar el resto de la normativa”, explicó. Alés añadió que las críticas del PSOE carecen de fundamento y que es “sorprendente” que cuestionen una decisión basada en un proceso democrático como la consulta pública.

El Ayuntamiento también ha destacado que la vuelta al formato tradicional no implica una alteración en el coste de las tasas, que “se mantienen igual que en 2017, cuando la Feria seguía el modelo de martes a domingo”. En cuanto a la preferia, el Consistorio reconoció que no está regulada en la Ordenanza y aseguró que será objeto de análisis en futuras modificaciones.

Por último, desde el equipo de gobierno han rechazado las acusaciones de falta de planificación. “Se trata de un paso necesario para dar sentido a una Ordenanza que nunca se ajustó al cambio de 2017. El proceso se ha llevado a cabo con total transparencia y conforme a la normativa vigente”, concluyó Alés.