El paso de la borrasca Martinho mantiene en alerta buena parte de la ribera del Guadalquivir, incluida la capital pero de forma especial El Palmar de Troya, donde la Agencia de Emergencias de Andalucía (EMA) mantiene el desalojo preventivo de 17 personas, mientras las lluvias han incrementado de nuevo el caudal de forma especial del Tamarguillo, alcanzando el nivel naranja, con inundaciones parciales en Valdezorras, como el Guadaíra por Puente Sifón, con el Guadalquivir creciendo pero sin ser alarmante.
Así, EMA ha comunicado que tras la última reunión del comité de operaciones celebrado en el Puesto de Mando Avanzado en El Palmar de Troya, se mantiene la evacuación preventiva de 17 personas en este núcleo, “al no darse aún las condiciones necesarias para su realojo”, pendientes de las últimas lluvias de madrugada y con la previsión de que vuelva a llover el viernes por la tarde.
Todos los operativos permanecen activados en la zona por si fuera necesario realizar más desalojos”, han apuntado, señalando que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) mantiene cerradas todas las compuertas del embalse, por lo que no está desembalsando, mientras se mantiene “la vigilancia de la cabecera de la cuenca para examinar la recogida de agua de los arroyos próximos”.
Según ha comunicado el Ayuntamiento de El Palmar, hay algunas calles anegadas por problemas de alcantarillado, que subsanará Aguas del Huesna, mientras el Infoca enviará este viernes más efectivos para reforzar las labores de recuperación y restauración de zonas afectadas.
Además, EMA mantiene labores de especial vigilancia en las zonas de El Coronil, Cantillana y Montellano en Sevilla, además de Espera en Cádiz, “sin que se hayan registrado incidencias relevantes en ninguna de estas localidades”.
Anegaciones en el Tamarguillo
En lo que respecta a la capital, se mantienen igualmente las labores de vigilancia y se han reforzado especialmente en la zona de influencia del río Tamarguillo, según fuentes municipales, ya que ha incrementado su caudal con la borrasca Martinho hasta situarlo en nivel naranja, al igual que el Guadaíra por Puente Sifón, según los datos del portal SAIH de la CHG, que sitúan en amarillo el del Guadalquivir.
De hecho, en la zona de Valdezorras, el aumento del caudal arroyo del Tamarguillo provocaba el corte de la calle Camino de los Indios con calle Caravelle, quedando cortada al tráfico la vía, mientras en Bellavista, en un paso subterráneo, se rescataba un vehículo que había quedado atrapado, sin que se registraran daños personales.
Incidencias por lluvias
En cuanto a la lluvia, se han registrado avisos en Carmona, Los Palacios y Villafranca, Alcalá de Guadaíra y Las Cabezas de San Juan. Así, en Carmona, los Bomberos intervenían en la urbanización Torrecilla en Torrepalma por anegaciones y han asistido también a una familia en la urbanización Entrearroyos por la crecida del arroyo El Rubio.
La mayoría de las incidencias se han producido por acumulación de balsas de agua en caminos y carreteras, junto con anegaciones parciales de viviendas, bajos y garajes.
A esta hora, en la provincia de Sevilla solo está en nivel rojo el río Huesna en Villanueva del Río y Minas, mientras que en naranja permanecen el Corbones por Carmona y el Guadiamar a su paso por Aznalcázar y Sanlúcar la Mayor.
Lora desactiva la fase de emergencia
Por su parte, Lora del Río ha desactivado la fase de emergencia del Plan Territorial de Emergencia Local debido a la bajada del caudal y cotas del río Guadalquivir y el arroyo El Churre; además de que la situación en la barriada Al-Andalus, la zona de El Calerín y la Alameda se mantiene controlada. Sin embargo, se mantiene la fase de pre-emergencia como vigilancia ante las previsiones meteorológicas de más lluvias.
Según el Ayuntamiento, en este último episodio de la concatenación de borrascas, Lora ha registrado el mayor caudal histórico del río Guadalquivir con 3.088 metros cúbicos de agua por segundo, pero no ha sufrido daños materiales al contar con un muro defensa, una estación de bombeo y varias medidas complementarias que han activado.
En 2010, durante la última crecida del Guadalquivir, el caudal máximo alcanzó los 1.800 cúbicos de agua por segundo e inundó las barriadas de la zona baja de la localidad.
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