La Junta de Andalucía ha cancelado 1.032 viviendas de uso turístico (VUT) en Sevilla como parte de un plan de regulación y control que busca equilibrar el turismo con la vida de los residentes. La medida forma parte de una estrategia más amplia que ha llevado a la cancelación de 6.771 VUT en toda Andalucía desde 2024. El objetivo es combatir el uso irregular de estos alojamientos, evitar la saturación en determinadas zonas y garantizar que el turismo en la ciudad sea sostenible y respetuoso con sus habitantes. Para ello, se han impulsado nuevas normativas, inspecciones automatizadas y sanciones más estrictas.
El consejero de Turismo y Andalucía Exterior, Arturo Bernal, explicó que estas acciones buscan poner orden en el sector sin demonizarlo. “Nuestra tarea y obligación como administración competente es su regulación y ordenación, no su demonización”, afirmó.
La capital andaluza ha sido una de las ciudades donde más viviendas turísticas han sido canceladas, gracias a la aplicación del Decreto de Viviendas de Uso Turístico. Este marco normativo permite a los ayuntamientos establecer limitaciones en función del número de viviendas por edificio, sector o zona, garantizando que el turismo no altere la vida cotidiana de los sevillanos.
Además, Sevilla forma parte de un convenio de colaboración junto a otras ciudades como Granada, Málaga y Cádiz, con el objetivo de mejorar la gestión de estos alojamientos y detectar posibles incumplimientos.
Inspecciones y sanciones
El control sobre las VUT en Sevilla se ha reforzado con inspecciones presenciales y automatizadas. A través de un sistema de web scraping, la Junta puede identificar viviendas anunciadas en plataformas digitales que no cuentan con el número de Registro de Turismo de Andalucía.
Para quienes intenten inscribir una vivienda en una zona ya saturada, el sistema mostrará automáticamente una advertencia: “La vivienda que usted va a inscribir se encuentra en una zona declarada saturada por el Ayuntamiento competente”, lo que conllevará la cancelación inmediata del registro y la posible apertura de un expediente sancionador.
Además, la nueva Ley de Turismo, actualmente en tramitación, endurecerá las sanciones para las infracciones graves. Mientras que hasta ahora oscilaban entre 18.000 y 150.000 euros, con la nueva normativa las multas podrán alcanzar los 600.000 euros.
Sevilla busca un turismo sostenible
La proliferación de VUT en Sevilla ha sido motivo de preocupación tanto para los vecinos como para el sector turístico. El Ayuntamiento ha insistido en la necesidad de equilibrar la oferta de alojamientos con el bienestar de la población local.
“Continuamos trabajando para que nuestro modelo turístico siga siendo un referente y siga generando oportunidades de futuro para los sevillanos”, concluyó Bernal.